Una entrada más para continuar relatando nuestra visita a la bella ciudad de Lampa de la que ya habíamos visto parte de sus encantos en la entrada anterior pero que aún guardaba muchos más...
Pintó el hambre y me fui a comer al restaurante LAS DELICIAS. Luego salí a sentarme en una de las bancas de la plaza que también fue mandada a remozar por... sí, adivinaron, Torres Belón... es un lugar muy bonito y, cosa peculiar, adornada por árboles de queñuas en todas sus entradas. No deben ser muchas las plazas adornadas con este tipo de árboles y sinceramente es un detalle fantástico. Hay también en el medio una fuente donde están representadas las muchas danzas típicas de este pueblo, entre ellas la famosa danza de los AYARACHIS quienes, se dice, bailaron en los funerales del Inca Atahualpa.
Plaza de Lampa
Fuente de la Plaza de Lampa
En esta plaza hay, también, una casa famosa llamada LA CASA DEL JUEGO DE LA OCA, que perteneció a la familia Bouroncle Carrión. Me dijeron que el dueño de la casa cobra 2 soles la entrada y 10 soles por tomar foto. Me espanté de saber el precio a pagar por una foto; por menos he entrado a inmensas ruinas preincas. Varias personas a quienes pregunté me dijeron que les parecía un precio abusivo. Igual, busqué al dueño para saber si por un precio más justo me podía dejar entrar para tomar fotos, pero nunca lo encontré pese a que lo busqué tres veces. Lo único que hallé fue un afiche en el cual aparecían su nombre y foto y se le promocionaba como candidato a alcalde de Lampa. Debajo de la foto decía MARCA LAS TRES ESTRELLAS (símbolo del partido del gobierno) y entonces entendí mejor ciertas cosas. Igual, si alguien está interesado o interesada hay que decir que el "juego de la oca" era un divertimento español que se jugaba en una mesa y con dados. Lo peculiar aquí es que el juego es del tamaño del patio. Lo vi desde las rendijas de la puerta. Sobrevive maltratado y, hasta donde sé, ya nadie sabe cómo jugarlo, las reglas se perdieron en el tiempo. Aunque esto no era exclusivo de los hacendados españoles, se cuenta que la casa de Torres Belón (que es hoy el colegio Juan Bustamante), tenía un juego ajedrez del tamaño de toda la superficie de su patio.
El Puente Colonial : vistas lejanas
Bajé por la calle Municipalidad hacia las afueras del pueblo donde está el PUENTE COLONIAL que es una joya arquitectónica que en 1840 fue reconstruida en piedra y revestida con sillar y que ahora es usado solo por peatones. Es un buen sitio para ver el Coachico, que es un volcán apagado, además de los tejados y la cúpula de la iglesia de Lampa. Antonio Raimondi, el sabio italiano que viajó por todo el Perú, habla del puente en sus escritos y cuenta que aquí vio picaflores gigantes. En algunas revistas he visto fotos muy bonitas del lugar pero con el bajo nivel del río salían a relucir la basura y desperdicios que están al pie de las bases del puente, una pena. Al lado se estaban construyendo un mirador eco - turístico que de ecológico no tenía nada... cemento sobre cemento.
Puente Colonial de Lampa
Puente colonial de Lampa
Puente colonial de Lampa
Al atardecer volví a la casa de don Edgardo quien me enseñó su pequeño "bosque", en la parte trasera de la casa. Allí tiene muchas plantas y, sorpresa, espárragos. Yo que pensé que solo crecían en la costa. Luego nos fuimos a caminar y me hizo notar algo que se me había pasado desapercibido: en las paredes de casi todas las casas se pueden ver pedazos de ceramios. ¿Cómo llegaron allí? La tierra usada para hacer las paredes (roja o salmón, de allí el nombre de "ciudad rosada") fue traída de las afueras del pueblo y no fue cernida por lo que al levantar los muros aparecieron aquí y allá los pedazos de ceramios de las antiguas culturas de la zona. "Mueves un poco de tierra aquí y encuentras historia" dice el señor Méndez y para comprobarlo me llevó a una casa que cuida.
Calles de Lampa, la "ciudad rosada"
Calles de Lampa, la "ciudad rosada"
Calles de Lampa, la "ciudad rosada"
Calles de Lampa, la "ciudad rosada"
Allí mi anfitrión había removido un pedazo de tierra para sembrar papa y encontró más retazos de cerámicas y hasta una especie de mortero hueco y la piedra que habría servido para moler. Fascinante. La casa, además, tiene una historia macabra: el antiguo dueño de la misma ("que era un hombre terrible") fue asesinado allí. Don Edgardo ha querido cambiar la historia y alejar los malos recuerdos de este lugar y ha abierto un lugar de oración para los evangélicos.
Esa noche el señor Méndez viajaba hacia Cuzco por lo que nos despedimos. Me recomendó ir a conocer el criadero de Chinchillas que son unos simpáticos roedores nocturnos en peligro de extinción que aquí protegen aunque por ser fin de semana estaba cerrado pero su visita es recomendable; también una "laguna colorada" que estaba a las afueras del pueblo y que ha sido recientemente "descubierta" o que me vaya a andar por el "Circuito Cordillerano" (el cual parte del pueblo de Vila Vila) y donde se ve un inmenso bosque de Puyas de Raimondi. También me aconsejó continuar desde dicho bosque hasta el Cañón de Tinajani para ver el fabuloso bosque de piedras, cerca a Ayaviri. Mi intención era hacer ese "circuito" pero no contaba con que no había transporte para esos lugares y el único modo de llegar era por taxi, pero el precio era muy caro (180 soles). Lástima. Me habló también de las cuevas de Lenzora, de aproximadamente 3000 mil años, donde hay 40 pinturas rupestres; de los restos de Lamparaquen, que son unas grandes murallas pre inca y de los molinos de Palca. Como ven... hay demasiado por conocer alrededor del Lampa y si se cuenta con el tiempo suficiente para visitar todo no hay que perdérselo. Por el momento ya había conocido las riquezas que se guarecían dentro de sus calles y edificios; ya tendría un pretexto para volver. Vale la pena quedarse a dormir una noche en Lampa pero es también posible conocer todo el pueblo y lo que he relatado aquí en un solo día. Si estás en Puno ciudad y quieres tener una alternativa novedosa visitar Lampa es la mejor elección. El acceso (vía Juliaca) es fácil y rápido.
En la noche estuve leyendo y empezó la lluvia y cuando amainó salí a buscar un lugar donde cenar. En la plaza había fiesta y por unos ruidosos parlantes se oían morenadas y sayas. El restaurante Las Delicias ya estaba cerrado (eran casi las 10 pm), lo único que encontré era un cobertizo con plásticos y palos donde se guarecían 4 hombres y una mujer que cocinaba para ellos. Allí, al amparo de la lánguida luz de una lámpara, disfrutamos la humildad de una comida que me supo delicioso: por 2 soles muchas papas y un huevo, fritos; arroz; salsas y mate. Me fui a dormir. Desperté muy temprano y paseé una vez más por la plaza. Me costaba irme y abandonar tanta tranquilidad. Compré unos clásicos panes cubiertos con queso (recomendados) y de nuevo me subí a la parte trasera de un taxi colectivo para volver a Juliaca a tomar un bus hacia Cuzco. Miraba cómo se alejaba Lampa mientras en la radio del coche cantaba Selena y yo iba tratando de asimilar todo lo sentido y visto; el respeto, la admiración y el constante asombro que me había despertado este pueblo y sus gentes. Había caído en la trampa de su belleza y había dejado "la capa" de mi alma. Ahora, a continuar el viaje que hay que seguir maravillándose y devorándose el mundo.Pablo
DATOS UTILES- RESTAURANTE LAS DELICIAS, en la Plaza Grau de Lampa, atiende Doña Delia. Almuerzo 3 soles. Vayan antes de la 1 pm porque todo vuela y en la noche antes de las 9 y 30 pm.
Lampa vista desde el ayuntamiento