Por suerte o por desgracia pertenezco a ese grupo de personas que tiene muchas aficiones. La desgracia puede estar en no disponer del tiempo suficiente para dedicarle a todas ellas, pero por todo lo demás, encantado de la vida. Y una de esos hobbies, son las linternas. De la misma forma me ocurre con las navajas y los cuchillos, y es que podría pasar horas viendo vídeos de youtube o leyendo sobre el tema. Es cierto que muchos de estos hobbies son prescindibles (que estupidez, como cualquier hobby, ahora que lo pienso), pero de vez en cuando me gusta darme un capricho, y en este caso, el susodicho ha ido a parar a una lámpara de aceite, o mejor dicho, de parafina.
No se que tiene el fuego, pero soy de los que si tuviese chimenea, pasaría horas embobado mirándola.
Hasta el momento, todas las linternas y lámparas que he ido comprando funcionaban gracias a pilas o a baterías recargables, pero de siempre me han llamado poderosamente la atención las antiguas lámparas de aceite, petroleo o parafina, también llamadas quinqués, así que cada vez que entraba a un bazar o a una ferretería echaba (y echo) un vistazo por si me topaba con alguna. Pero aunque recuerdo que años atrás era fácil encontrarlas, hoy día se ha vuelto tarea complicada, imagino que habrán quedado olvidadas debido al auge de las linternas modernas, y ya no es tan sencillo dar con ellas.
Y cuando no encuentras algo en las tiendas que hay a tu alrededor, lo mejor es echar mano de aliados como Amazon, Aliexpress, o cualquier tienda online. Aliexpress lo descarté porque no me daba ninguna seguridad el envío de algo de cristal que igual lo traían a patadas desde allí, y porque apenas había diferencia de precio con Amazon. Y en esta última las tienen, pero a precio de oro, ya que no bajaban prácticamente de los 40 €.
Y entonces me topé con una ferretería online (ubicada físicamente en Murcia) que conocía de hacía tiempo pero a la que no había pedido nunca nada: ferrehogar.es y que está especializada en la venta de material bushcraft, outdoor, trekking, acampada, etc.
Siguiendo la pista de una lámpara de la marca alemana Petromax, el modelo HL1, llegué a la web de esta ferretería, pero resultó estar descatalogada, así que siguiendo con las pesquisas, descubrí que efectivamente ya no se fabricaba, y tirando del hilo, apareció la Feuerhand, también alemana. Petromax fue fundada por Maz Graetz en Berlín y debe su nombre al apodo con que sus amigos se referían a Max: "Petroleum Max".
Petromax HL1, ya descatalogada.
Llegué a la conclusión de que no merecía la pena comprar una lámpara barata, seguramente copia de las genuinas, que por otra parte tampoco son tan baratas si las comparas con una Feuerhand original, por ejemplo, así que compré ésta última.La marca Feuerhand fue fundada en 1893 en Beirfeld (Alemania) por dos hermanos, y fue absorbida en 2014 por Petromax. Lo curioso de Feuerhand es que sólo fabrica un modelo de lámpara desde 1989, la Feuerhand Lantern Baby Special 276 en diferentes colores finales. El modelo "Eternity" es una versión especial conmemorativa de los 111 años (1902-2013) que llevan fabricando dichas lámparas.
Lamparas Feuerhand
Tras lo que simplemente parece una lámpara antigua de parafina hay todo un sistema patentado en el que la circulación del aire por el interior y el galvanizado exterior con el que se ha fabricado, dan la personalidad a dicha lámpara.
Tiene una altura (sin el asa) de 25,5 cm., un peso de 520 gr. y un depósito con capacidad para 340 ml. de parafina, que nos puede llegar a proporcionar hasta 20 horas de luz. Por otra parte, el cristal es del tipo Suprax, resistente al calor. Y por si fuese poco, el galvanizado exterior le proporciona resistencia al agua y al frío, lo que la hace perfecta para usarla casi en cualquier condición. La mecha dispone de un mecanismo que con solo girar una pequeña llave, conseguiremos mas o menos luz.
Detalle de la parte superior de la lámpara.
Y aquí la parte del depósito y la mecha.
Lámpara en funcionamiento.
Como decía, la lámpara funciona con parafina, y se pueden encontrar repuestos del cristal, el quemador, la tapa del depósito, y obviamente de la mecha. La parafina que se puede utilizar es cualquiera que encontremos y cuya función sea para lámparas o quinqués, y he dado con una marca española, fabricada en Toledo, Velas Lumar, que va muy bien, y que se puede encontrar en bazares chinos.A la izquierda, el combustible recomendado por el fabricante, Petromax Alkan, que se puede comprar en ferrehogar.es a un precio de de 5,50 € el litro, y a la derecha, parafina de la marca Velas Lumar, comprada en un bazar chino por 3,95 € el litro.
Si te gustan las lámparas, esta es la versión más clásica que vas a encontrar, y la verdad es que mola un montón.