Si estas de visita, o de vacaciones en Lanzarote, seguro que te interesa conocer los encantos que nos dejo César Manrique, lanzaroteño de nacimiento que regreso de su estancia en el extranjero, concretamente en New York, y se instaló finalmente en Lanzarote.
César Manrique se puso pronto en marcha para generar las condiciones con las que la Lanzarote se transformaría en un destino turístico respetuoso con su paisaje e identidad cultural, gracias al apoyo que le prestó José Ramírez Cerdá.
El equipo formado por César Manrique y José Ramírez, junto a la conciencia social generada por el periódico insular “La Antena”, facilitaron convertir, en tan sólo una década, a Lanzarote en algo más que un destino turístico que destacaba ya por su buen clima y bonitas playas, donde el paisaje agrícola, la naturaleza volcánica de su isla, la idiosincrasia del isleño, el arte y la arquitectura tradicional se entremezclaron para crear una marca turística única, situando a los hotel en Lanzarote en la vanguardia del turismo.
Se inauguraron la Cueva de los Verdes, acondicionado por el artista Jesús Soto, la escultura “Fecundidad” o también llamada el “Monumento al campesino ” junto la una Casa-Museo inspirada en la arquitectura tradicional. Posteriormente le seguirían obras como la del Mirador del río, el Centro de visitantes de las Montañas del Fuego, conocidas como Timanfaya, el Museo Internacional de Arte del Castillo de San José y el acondicionamiento de Los Jameos del Agua. Y así Lanzarote supo combinar una red de centros en los que arte y naturaleza se fusionaban para seducir a los visitantes , tanto de las islas cercanas como del extranjero. Y fue como nació en los “conejeros” o lanzaroteños una conciencia ambiental que hizo merecedora a la isla del título de la Reserva de la otorgado por la Unesco en el año 93.
La rápida decadencia sufrida por el sector pesquero, que anteriormente era un pilar en la economía de la isla, pasó a un segundo plano. Y si a esto añadimos la ocupación de la antigua colonia española del Sáhara Occidental por parte de Marruecos, en el año 75, que supuso para Lanzarote la pérdida del caladero tradicional en el que faenaba la flota pesquera de la isla. Lanzarote sufrió un cambio, y los sectores primarios de la economía insular cambiaron, dejando paso a la hegemonía del turismo y las actividades asociadas a él, como la construcción, hostelería comercio, y un largo etc.
Si todavía no conoces Lanzarote y quieres además de playa darte un baño cultural, debes visitar las estupendas obras de César Manrique, ¿qué más razones necesitas para venir?, sol y playa garantizadas con un plus de cultura ☺ . ¿No te parece un buen plan?.