Esta semana voy a repasar dos patologías que solemos atender los médicos que hacemos guardias, principalmente en el medio rural. Hoy voy a tratar de la Laringitis aguda y el próximo día lo haré de la Bronquiolitis aguda. La Laringitis aguda es la infección obstructiva de la vía aérea superior más frecuente en la infancia, principalmente en niños de entre 6 meses y 6 años. La etiología más común es la viral y aumenta su incidencia en otoño y principios de invierno. La clínica habitual es tos ronca o perruna y disfonía, con estridor inspiratorio y dificultad respiratoria. El diagnóstico es clínico. Los Corticoides son la base del tratamiento. El de elección es la Dexametasona oral en dosis única de 0,15 mg/Kg. En España hay comprimidos de 1,4 y 8 mg, pero si deseamos una solución habría que prescribirla por fórmula magistral. Como segunda opción está la Prednisolona (Stilsona gotas®)en dosis de 1-2 mg/kg, pudiéndola repetir al día siguiente si persiste la sintomatología. En casos de Laringitis moderada-grave puede usarse la Adrenalina nebulizada en dosis de 0,5 mg/kg/dosis, hasta un máximo de 5 ampollas, pudiendo repetir la nebulización, cada 20-30 minutos, hasta 3 veces. Se produce una mejoría a los 10-30 minutos pero su efecto no dura más de 2 horas, por lo que los niños a los que se les aplique deben estar en observación durante 3-4 horas, por si una vez pasado el efecto vuelven los síntomas a la situación basal. Las medidas no farmacológicas, como la humidificación del aire, no han demostrado su utilidad, si bien puede proporcionar otros beneficios como disminuir la sequedad de la mucosa y hacer que las secreciones sean menos espesas, con mayor tranquilidad para el niño y los padres. Dejo artículo de Infac de 2011.