Las 10 cosas que debes saber sobre la desconocida hidradenitis supurativa

La hidradenitis supurativa (HS), también conocida como hidrosadenitis o "golondrinos", es una enfermedad crónica que afecta la piel y tiene un gran impacto en la vida de quienes la padecen. Aunque es una condición poco conocida, es importante difundir información sobre ella para mejorar el diagnóstico y tratamiento. A continuación, con la ayuda del Dr. Javier García, jede Dermatología del nuevo Centro Médico Paseo de la Habana Hospital Ruber Internacional, y uno de los referentes internacionales en esta enfermedad, te contamos 10 informaciones clave que debes saber sobre la hidradenitis supurativa:

1. Es una enfermedad crónica y autoinflamatoria

La hidradenitis supurativa es una enfermedad autoinflamatoria, lo que significa que el sistema inmunológico ataca por error el propio cuerpo, en concreto se dirige contra los folículos pilosos localizados en áreas pobladas por glándulas apocrinas. Las glándulas ecrinas son las que producen sudor mientras que las apocrinas se encuentran principalmente en axilas, ingles y región perigenital, y son las que producen mal olor. Esta condición es crónica, por lo que quienes la padecen sufren brotes recurrentes a lo largo de su vida.

2. Afecta al 1% de la población

Se estima que alrededor del 1% de la población tiene hidradenitis supurativa. En España, esto representa a cerca de 500.000 personas afectadas, lo que indica que no es una enfermedad tan rara como podría pensarse.

3. Las lesiones no son "Simples Granos"

A menudo, la HS se confunde con granos o furúnculos, pero los brotes que genera son mucho más severos y recurrentes. Las lesiones pueden formar nódulos dolorosos, abscesos y fístulas que drenan pus, y no solo afectan la piel superficial, sino también las capas más profundas, causando dolor intenso.

4. Las zonas afectadas son delicadas

Las lesiones de la hidradenitis aparecen en los grandes pliegues corporales, como:

Estas zonas son particularmente sensibles y su afectación puede limitar la movilidad y causar molestias diarias.

5. La enfermedad impacta la calidad de vida

La HS no solo afecta físicamente, sino que también tiene un gran impacto en la calidad de vida. Las personas que la padecen pueden experimentar problemas en sus relaciones interpersonales, disminución de la autoestima y problemas de imagen personal. Además, los casos más graves están asociados a trastornos emocionales como la ansiedad y la depresión.

6. El diagnóstico suele retrasarse

Uno de los mayores problemas con la hidradenitis es que el diagnóstico suele retrasarse, con una media de 8 años desde la aparición de los primeros síntomas hasta la confirmación de la enfermedad. Este retraso aumenta el riesgo de complicaciones y empeora la calidad de vida del paciente.

7. El autocuidado es clave

El autocuidado es fundamental para evitar complicaciones. El Dr. Javier García recomienda no ocluir las lesiones, permitir que drenen de forma adecuada y cubrirlas con gasas para reducir el dolor y el impacto de la supuración. Evitar un exceso de humedad y mantener una buena higiene, especialmente en verano, también es importante.

8. Existen dos formas principales de hidrosadenitis

La hidradenitis supurativa tiene dos formas principales de presentación:

• Forma folicular: Caracterizada por la aparición de puntos negros y nódulos superficiales, afectando al 65% de los pacientes. Suele aparecer en la adolescencia y está influenciada por factores como la obesidad y el tabaquismo.
• Forma inflamatoria: Menos común, pero más grave. Produce grandes bultos con secreción, fístulas y placas duras en la piel, que limitan la movilidad.

9. Está asociada con otras enfermedades

La HS no aparece de manera aislada. Se asocia con enfermedades como el síndrome de ovario poliquístico, la obesidad, la diabetes, la enfermedad inflamatoria intestinal (como la enfermedad de Crohn) y la artritis. El tratamiento de la HS también puede requerir el manejo de estas comorbilidades.

10. El tratamiento es personalizado

El tratamiento de la hidradenitis supurativa se adapta a la gravedad de la enfermedad. En los casos más leves, se utilizan tratamientos tópicos, antibióticos orales, la depilación láser y medidas de autocuidado. Sin embargo, para las formas más graves, el Dr. Javier García, experto en hidradenitis, aconseja los fármacos biológicos que controlan la inflamación crónica y la cirugía específica de las lesiones. El uso de la ecografía cutánea es muy interesante para valorar la enfermedad y guiar las cirugías. La buena noticia es que se espera que pronto aparezcan nuevos medicamentos que ofrezcan mejores opciones de tratamiento para los pacientes.