¿Le atrae el sur de Francia? ¡Dirígete a los países occitanos y catalanes con nuestras 21 visitas obligadas para ver en Occitania!
Desde 2016, la región de Occitania reúne las antiguas regiones de Languedoc-Rosellón y Midi-Pyrénées. Es decir, alrededor de un tercio de Francia. Es el país de la Langue d’Oc, un dialecto del sur, que ha conservado la mayor influencia de la lengua romance. Entre el mar Mediterráneo, los Pirineos, los cañones, los pueblos de montaña y la gastronomía, resulta complicado tener que hacer una selección entre todas las actividades de la región.
¡Pero aquí tienes algunas ideas para tus escapadas con estos 21 increíbles de Occitania!
1. La ciudad de Carcasona
La ciudad fortificada medieval de Carcasona es una visita obligada en Occitania. Sus 3 kilómetros de murallas y sus 52 torres son visibles a kilómetros a la redonda. La ciudad es también el ejemplo más famoso de los trabajos realizados por Viollet-Le-Duc en el siglo XIX para rehabilitar edificios medievales. Podrá admirar la basílica de Saint-Nazaire, el castillo condal, pasear por las listas o simplemente pasear por el casco antiguo. El único inconveniente es que tendrás que lidiar con hordas de turistas.
2. Monte Canigó
Es el pico más famoso de los Pirineos orientales con sus 2784 metros de altura. Puedes hacer muchas caminatas allí y subir a su cumbre (ver ruta) si eres un deportista experimentado. Por lo demás, le esperan muchos paseos más accesibles en paisajes magníficos, sin olvidar la abadía de Saint-Martin du Canigo construida sobre una cima rocosa.
3. Las justas de Sète
Bordeada por el estanque de Thau y el mar Mediterráneo, Sète es una ciudad popular entre visitantes y artistas. Sus museos, sus playas de arena fina, su arquitectura y su gastronomía han hecho de la ciudad una visita obligada en Occitania.
Pero si hay algo que hay que ver absolutamente en Sète son las justas náuticas. Organizados de junio a septiembre, siguen reglas y ceremonias muy específicas antes de que comience la pelea. ¡Tus apuestas!
4. Los castillos cátaros
¡Imposible visitar Occitania sin atacar las fortalezas cátaras! Quéribus, Montségur, Peyrepertuse, habrás oído hablar algún día de estos castillos encaramados en cimas rocosas a varios centenares de metros de distancia. Reputados como inexpugnables, algunos tuvieron una historia trágica durante la cruzada contra los albigenses conocidos como los cátaros, que formaron un grupo de creyentes disidentes del catolicismo en el siglo XIII. Una cosa es segura, explorarlas con el viento que sopla entre las ruinas es una experiencia inolvidable.
5. Las gargantas del Tarn
Forman uno de los cañones más famosos de Francia, lo que los hace parecerse a la carretera de circunvalación parisina durante la temporada de verano. Dicho esto, sería una auténtica lástima perderse el panorama que ofrecen las aguas cristalinas, las rocas escarpadas y los pueblos al borde de los acantilados. A pie o en kayak, ¡tú decides cómo descubrirlos!
6. Las Cevenas
El Parque Nacional de Cévennes ofrece una gama tan amplia de actividades y cosas para ver que es necesario darse tiempo para descubrirlo. Entre la Corniche, un antiguo camino real, las Causses, mesetas desérticas ideales para practicar senderismo, los pueblos con encanto y la gastronomía local, no es probable que se aburra.
7. Aigues-Mortes y la Camarga
Es una de las cosas más bellas que ver en Occitania, el espectáculo de las murallas de la ciudad de Aigues-Mortes sumergiéndose en las aguas rosadas de las Salins du Midi. Pero eso no es todo, la región de los flamencos y los caballos salvajes tiene mucho más que ofrecer.
Si vas en mayo, no te pierdas la peregrinación que reúne a comunidades de viajeros de toda Europa a Saintes-Maries-de-la-Mer. Los amantes de la naturaleza no se quedan excluidos del magnífico parque ornitológico del Pont de Gau.
8. El Puente del Gard
¡Esta es la foto imprescindible que debes tomar durante tu visita a Occitania! Hay que decir que los romanos eran conocedores de destrezas técnicas y tenían cierto gusto por elegir su entorno. La vista del acueducto con sus tres hileras de arcadas y la naturaleza que lo rodea es impresionante.
9. Nîmes
Se podría creer que la ciudad está atrapada en su pasado antiguo, pero no es así. Por supuesto, no debes perderte la famosa Arena, la Maison Carré y los jardines Fontaine que sirven de escenario a los restos romanos. Pero también debes tomarte el tiempo para admirar su museo de arte contemporáneo, su nueva y atrevida arquitectura y disfrutar de su escena cultural.
10. El Canal del Mediodía
Este es el paseo romántico ineludible en Occitania, siguiendo el Canal du Midi, en barco, a pie, en autocaravana o incluso en bicicleta. Antiguo canal real excavado para conectar el Mediterráneo con el Atlántico, es imprescindible tomarse el tiempo para dejarse arrullar por su tranquilo curso bajo los plátanos y admirar los paisajes.
Alquila un barco para explorar el Canal du Midi
11. La sima de Padirac
Después de navegar al aire libre, ¿por qué no probar a dar un paseo por el río subterráneo del Lot, a 103 metros bajo tierra? Los más valientes elegirán la vertiginosa escalera para llegar a las entrañas de la tierra y admirar las maravillosas esculturas de estalactitas en las que se reflejan las aguas cristalinas.
12. Rocamadour
Es uno de los pueblos más emblemáticos para visitar en Occitania. No sorprende descubrir sus casas medievales literalmente aferradas a la roca del acantilado a 150 metros sobre un cañón. Pero para tener la vista más mágica, debes ir allí al atardecer, cuando el pueblo aparece al doblar una curva.
13. Saint-Cirq-Lapopie
La antigua región de Midi-Pyrénées cuenta con numerosos pueblos muy bonitos y Saint-Cirq-Lapopie es uno de ellos. El pueblo medieval, con sus vistas al Lot, atrae cada año a numerosos visitantes, pero si desea un poco más de tranquilidad, no se pierda su camino de sirga excavado en la roca, justo encima del río.
14. Las gargantas del Aveyron
Menos frecuentadas que las del Tarn, las gargantas del Aveyron ofrecen, sin embargo, bellos panoramas. Ya sea que los sigas por agua o por tierra firme, ofrecen una hermosa diversidad de paisajes entre naturaleza verde, acantilados y fortalezas encaramadas. Un paseo que no debe perderse en Occitania.
15. Albí
¡Pasear por el corazón de la ciudad de ladrillo rojo es un placer que no debe pasarse por alto! Esta es la oportunidad de descubrir la ciudad episcopal declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, de estremecerse ante el Juicio Final en la catedral antes de admirar las luces de la ciudad desde el Puente Viejo. Pero sobre todo, no olvides visitar el magnífico Museo Toulouse-Lautrec.
16. Tolosa
¡Quedémonos en tonos cálidos con el descubrimiento de la ciudad rosa! Varios días no serán demasiados para explorarlo, ya que hay muchas cosas que ver. Entonces, entre el Convento de los Jacobinos, las orillas del Garona, la Plaza del Capitolio y la Ciudad del Espacio, ¿por dónde empezar?
17. Cuerdas en el cielo
Otro de los pueblos de Francia más bonitos que ver en Occitania pero te lo prometo, es el último de esta lista. Como beneficio adicional con este, harás una sesión deportiva porque tendrás que escalar para llegar a la cima de la bastida. Recuerda tomar descansos durante la subida para mirar hacia arriba y admirar la hermosa arquitectura gótica de las casas.
18. El Pico del Mediodía
¡Bienvenidos al techo de los Pirineos! El ascenso en teleférico a unos 300 metros de altura es ya un viaje en sí mismo. Una vez en la cima, podrá disfrutar de panoramas excepcionales de todo el macizo antes de hacer una excursión al planetario y a la cúpula del astrónomo. Todo a más de 2800 metros sobre el nivel del mar.
19. El Circo de Gavarnie
Es uno de los sitios naturales imperdibles de Occitania. La belleza del circo, excavado por la erosión glaciar, inspiró incluso un poema de Víctor Hugo, ¡eso es mucho decir! La buena noticia es que no es necesario ser un gran deportista para descubrirla porque la caminata que lleva a la cascada (ver ruta) es accesible para todos.
20. Viñedos de armañac
Tu visita a Occitania debe terminar con estilo y, para ello, ¡dirígete al Gers para probar el brandy de vino más antiguo del mundo! Aprovechará la oportunidad para seguir los pasos de D’Artagnan quien, según Dumas, amaba mucho el Armagnac.
21. Montpellier
Montpellier, antigua capital de Languedoc-Rosellón, es una ciudad imprescindible cuando se visita Occitania. Cerca del mar, atrae a muchos turistas cada año… ¡pero no sólo eso! De hecho, la que llamamos Surdouée atrae a los franceses por su calidad de vida.
Montpellier es también una ciudad estudiantil. Por tanto, la vida nocturna está muy desarrollada allí. Además, no te pierdas su Facultad de Medicina, la cuna de la medicina en Europa. Por último, dé un paseo por el Écusson. Salga de la Place de la Comédie y llegue a los jardines de Peyrou y su Arco de Triunfo.
Por avión
La mayoría de las grandes ciudades de la región disponen de aeropuerto, siendo las más importantes Toulouse y Montpellier que ofrecen el mayor número de conexiones de la región. Para encontrar el vuelo más adecuado para su estancia, puede utilizar un comparador de vuelos como Ulysse.
En coche
La red de autopistas sirve bien a la región, incluida la A20, A75 y A61. Para un viaje eco-responsable, ¡no dudes en compartir el coche!
En tren
En TGV se puede llegar a Occitania desde las estaciones de TGV de Montpellier, Toulouse y Nimes. También es fácil viajar a Albi, Perpiñán o Narbona.
¿Dónde alojarse en Occitania?
La región es un destino turístico popular por lo que la oferta de alojamiento es muy diversa. Puedes elegir entre hoteles con encanto, campings, lodges, Airbnb o incluso habitaciones inusuales. Para hacerte una idea, puedes echar un vistazo a algún comparador de hoteles.
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