Las 3 bebidas francesas de un foodie traveler

Disfruta tu pasión por el maridaje. Conoce las 3 bebidas francesas más populares y brinda con nosotros.

Los viajeros DINKtravelers nos distinguimos por tener un paladar exigente. Por eso, en cada lugar que visitamos exploramos el menú que le da personalidad al país. En cuanto a la coctelería internacional, te hemos presentado la tradición del sake japonés, la ruta para probar los mejores gins y el inigualable mezcal mexicano. Ahora toca enamorarnos de las deliciosas bebidas francesas, perfectas para maridar con una ratatouille.

Turismo foodie 

La tendencia del turismo foodie está revolucionando el modo de viajar en el siglo XXI. Actualmente hay hoteles que albergan más de 10 restaurantes internacionales para satisfacer la curiosidad culinaria de sus huéspedes. Además, ahora existe un rubro especial de visitas guiadas con enfoque gastronómico. Éstas son ideadas como rutas que conducen a los viajeros por los lugares más adecuados para consumir los platos locales. Así nació el turista foodie,que se autodefine como un aficionado de la gastronomía, puesto que dedica la mayor parte de su tiempo libre a conocerla y comparar sus experiencias con otros apasionados del buen comer.

Diferencia entre foodie traveller y un viajero gourmet 

Es importante distinguir entre el viajero foodie y el viajero gourmet, categoría en la que entran los catadores, por ejemplo. Un gourmet es una persona que ha estudiado alta cocina y ha entrenado sus papilas gustativas y olfativas con el fin de distinguir la intensidad de los sabores y aromas característicos de cada plato o bebida. Esto explica su preferencia por los platillos más sofisticados. En cambio, un foodie es un amateur de la gastronomía, siempre deseoso de experimentar nuevos sabores y dispuesto a aprovechar los viajes para aprender de cocina. Un dato curioso es que muchos viajeros gourmet empezaron siendo foodies, así que el camino al éxito está en la aventura de probar cuantos guisos nos apetezca y en el proceso adiestrar el gusto y el olfato.

Vacaciones culinarias 

Hoy las agencias de viajes han incorporado planes de vacaciones culinarias con una agenda especializada en visitas a restaurantes y bodegas de licores. De acuerdo con sus preferencias, los sibaritas pueden elegir si suman un chef especializado que amenice sus recorridos o un nutriólogo que complemente sus degustaciones con datos interesantes para la salud. Además, hay paquetes que dan un plus a la experiencia gustativa. Estos permiten a los viajeros aprender sobre el proceso de elaboración de quesos y pastas, o asistir a cursos de cocina para hornear, por ejemplo, su propio pastel al mismo tiempo que se consienten eligiendo los mejores chocolates para bañarlo. Este tipo de propuestas se suman a algunas anteriores como los tours con cata de vinos.

Viajar como un sommelier 

Otra opción para recorrer el mundo por razones culinarias es hacerlo como sommelier. Éste es un especialista en bebidas con o sin contenido alcohólico. Se dedican de tiempo completo a la cata y el maridaje. Aunque regularmente esta profesión se asocia con los vinos, existen también conocedores del té, el café, el mate y la cerveza, por nombrar algunos.

Lo más interesante es que quienes viajan como sommelier no sólo van a probar las bebidas, sino que llegan hasta los lugares donde se producen. Se documentan sobre las regiones de procedencia, los grados de calidad y las costumbres para su consumo en distintas partes del mundo.

Las 3 bebidas típicas de Francia

Si quieres programar unas vacaciones largas en Francia combinando arte, cultura y buenas bebidas, toma nota. DINKtravelers, tu guía de viajes internacional, te recomienda éstas bebidas típicas de Francia:

#1 Pastis francés

Es un licor de anís típico de Marsella y Provenza. Se obtiene de la destilación de alcohol etílico combinado con manzanilla, hinojo y hojas de tomillo. Se trata de una bebida con alta concentración alcohólica, aunque existen también versiones sin alcohol. Los franceses lo toman frío e inclusive recomiendan añadir hielos, así que es un aperitivo ideal para el verano. El pastis tiene fama de versátil ya que es común encontrarlo como coctel mezclado con saborizantes como la granadina o el jarabe de menta, dando así un acento distinto a su sabor original. La casa productora más famosa en Francia es la Ricard, a la que se atribuye el inicio de la producción de pastis en el país. Se dice que la bebida se popularizó en la época en que el absinthe se prohibió en Francia, por lo que se volvió un sustituto hasta alcanzar su propia fama y público aficionado.

#2 Armagnac 

Se trata de una de las bebidas típicas de Francia, el brandy más antiguo de este país pues sus orígenes se pueden rastrear hasta el siglo XIV. En ese entonces, su base alcohólica tenía usos puramente medicinales. Décadas después, el Armagnac se empezó a vender para consumirlo envasado. Las principales regiones productoras son Landes, Lot et Garonne y Gers. Tiene una alta graduación alcohólica, ya que se obtiene de la destilación de vino blanco seco de 4 tipos de uvas distintas: Ugni-Blanc, Folle Blanche, Baco y Colombard. Es común tomarlo solo después de la cena, como bebida digestiva. La clasificación del Armagnac depende de su edad puesto que una de las características de este licor es que se deja envejecer en barricas de roble ¡hasta por 20 años!

 #3 Vin chaud 

Es una bebida caliente elaborada a base de vino tinto acompañado de diversas especias. En Francia el vino caliente data de la época romana, tiempo en el que dicha bebida estaba reservada para la aristocracia que la tomaba en el invierno. Fue a partir del siglo XVII cuando su consumo se hizo público y todos pudieron disfrutar de tan sabrosa mezcla. En Francia, el vin chaud se elabora con vinos de la región de Bordeaux y se ha vuelto la bebida típica de Navidad. Los expertos recomiendan beberlo acompañado de algún postre de moderado dulzor.

Preparar vin chaud francés  

Si quieres disfrutar desde casa los sabores invernales de París, DINKtravelers te comparte la receta para preparar vin chaud. Necesitas: 1 botella de vino tinto, 120 g de azúcar morena, 1 raja de canela, dos pizcas de jengibre rallado, 5 clavos de olor, 1 cucharada de cardamomo triturado y ralladuras de naranja y limón. ¡Manos a la obra! Mezcla el vino con el azúcar en un recipiente y cocínalo a fuego lento. Cuando empiece a hervir, añade los demás ingredientes y revuelve durante al menos 20 minutos. Sirve y disfruta.

Prepara tus maletas y vive una travesía llena de sabor con las mejores bebidas francesas.