Las alcaldías más sorprendentes del nuevo mapa político municipal.

Daniel de la Rosa, alcalde de Burgos.

Los dos bloques que durante el ciclo electoral parecían claros, las izquierdas (PSOE-Podemos) y las derechas y ultraderecha (PP, Ciudadanos y Vox), consiguieron un panorama sorprendente en el que el PP gobernará en cuatro grandes capitales, Madrid, Murcia, Málaga y Zaragoza, con la ayuda de Vox y gracias a sus acuerdos con los naranjas, que confirman así su asentamiento en la derecha y extienden su poder territorial. Capitales de provincia como Burgos, Huesca, Jaén y Cáceres acabaron en manos socialistas por la rebeldía de ediles conservadores o acuerdos de legislatura entre PSOE y Ciudadanos cuando el centro-derecha tenía opciones de gobernar. Un centro-derecha que pudo haber tenido más poder municipal y mayorías reforzadas si, en una quincena de localidades de mediano y gran tamaño, las tres formaciones que protagonizaron la manifestación de Colón (PP, Ciudadanos y Vox) se hubieran puesto de acuerdo.La jornada electoral dejó imágenes sorprendentes. En Burgos, por ejemplo, pese al acuerdo global anunciado en un principio por los naranjas y la formación ultraderechista, no lograron alcanzarlo. El resultado fue que el socialista Daniel de la Rosa fue elegido alcalde, a pesar de que contaba únicamente con sus 11 concejales y los dos de Podemos. Vicente Marazón, de Ciudadanos, obtuvo 12, siete del PP y cinco de su partido, mientras que los dos ediles de Vox se descolgaban, votando a su cabeza de lista, Ángel Martín en el pleno de constitución de la Corporación municipal. Tampoco en Huesca se reprodujo dicho pacto a tres que habría hecho alcaldesa a la ‘popular’ Ana Alós. La mayoría para quedarse con el consistorio estaba situada en trece ediles, una cifra que podrían haber sumado PP (9), Ciudadanos (3) y Vox (2). Sin embargo, un voto en blanco de un “culpable” hizo que la vara quedase en manos del socialista, Luis Felipe, que encabezaba la lista más votada en las elecciones.En Albacete y Ciudad Real, el PSOE y Ciudadanos se turnaron el sillón del primer edil entre los dos partidos, rompiendo así la política de bloques que caracterizó las elecciones. Lo mismo ocurrió en Ciudad real, donde se turnarán dos alcaldesas: Pilar Zamora (PSOE) y Eva María Masías (Ciudadanos) y en Extremadura, con el PP y Ciudadanos. En cambio, en Palencia, el sillón se lo quedó Ciudadanos, con Mario Simón, con el respaldo de populares y de Vox. En Cartagena, donde Ciudadanos fue el partido más votado un pacto de última hora logró que gobierne la socialista Ana Belén Castejón fuera investida alcaldesa este sábado. En el pueblo extremeño de Jerez de los Caballeros, PP y Ciudadanos auparon a Podemos, impidiendo que la socialista, Virginia Borrallo, se quedase con la alcaldía a pesar de ser la más votada en los comicios. Y, en Melilla, la aritmética caprichosa hizo que Eduardo de Castro, único concejal de Ciudadanos, se convirtiera en alcalde gracias a incorporar a su acta los ocho apoyos de Coalición por Melilla (CpM), y los cuatro del PSOE. Juan José Imbroda, del PP, no solo perdió laImbroda se va de la Asamblea y llama 'traidor' y 'sinvergüenza' a De Castro presidencia, sino que protagonizó uno de los momentos más tensos de la jornada, encarándose con Castro.