El 'Mar Cantábrico', de la Compañía Marítima del Nervión, fue incautado por el Gobierno de la República en Valencia, en julio de 1936. Comienza a prestar servicio como buque prisión para luego realizar viajes de transporte de tropas entre Valencia y Baleares.
En diciembre de 1936 pone rumbo al puerto de New York (USA) al objeto de recoger armamento y material de aviación. Durante el trayecto, el 6 de enero de 1937, el Senado de los Estados Unidos aprueba una ley prohibiendo el envío de armas a España. El que años mas tarde fuese presidente del Consejo de Ministros de la República en el Exilio, Félix Gordón Ordás por entonces embajador de España en México, interviene ante el gobierno de USA y consigue que el "Mar Cantábrico" zarpe rumbo a España con parte del cargamento, teniendo que renunciar a cargar 10 aviones de combate. Desde ese momento el ejército sublevado conoce la operación.
Desde New York, el buque se dirige al puerto de Veracruz (México) a completar carga. Desde allí, el 19 de febrero de 1937, partiría para España con una ruta desconocida para su capitán en evitación de que la misma fuese conocida por el espionaje franquista. Zarpa el "Mar Cantábrico" de Veracruz, camuflado, cambia su nombre por el británico "Adda" matriculado en New Castle, emplea lonas embreadas para alterar su perfil y cambia colores. Según las instrucciones recibidas, un día después de zarpar el capitán abre el sobre sellado que le fue entregado poco antes de la salida, allí figura el puerto de destino, Santander, y la clave secreta para comunicarse por radio con Madrid.
El día 21/02/37, Indalecio Prieto trasmitió dos mensajes al Lendakari Aguirre, el primero con las instrucciones que llevaba el capitán, con enlaces de interés, indicativos de llamada, onda, datos de claves a utilizar, etc. y el segundo con el conocimiento de embarque, con la carga que transportaba. Los días 22, 23 y 25 el barco comunicó con Gordón Ordás por radio. Todas estas comunicaciones fueron en claro y captadas por Palma Radio, llegando lógicamente a los mandos navales franquistas, que no tienen ninguna dificultad en descifrarlas gracias a las claves dadas a conocer por Prieto en sus mensajes a Aguirre ya interceptados.
Conocida al detalle la información, la marina sublevada solo tiene que esperar tranquilamente a que el mercante se "ponga a tiro" y prepara un dispositivo para apresarlo o hundirlo. Finalmente el "Mar Cantábrico" es cañoneado por el "Canarias" a pocas millas del puerto de Santander, abordado, la tripulación apresada y conducido a Ferrol, quedando a disposición de la marina sublevada, junto con su carga de armas. Una vez artillado (piezas de artillería, ametralladoras y cañones antiaéreos), el 25 de junio de 1937 queda convertido en crucero auxiliar al servicio de los sublevados. Finalizada la guerra el buque vuelve a sus propietarios y sigue con sus viajes comerciales.
La carga que transportaba el ‘Mar Cantábrico’ está detallada en un telegrama cifrado emitido por el embajador de España en Méjico, Félix Gordón Ordás dirigido a Julio Álvarez del Bayo, Ministro de Estado, telegrama que éste a su vez remite al Ministro de Marina y Aire, Indalecio Prieto. Dicha comunicación se encuentra custodiada en el Archivo Histórico de Euskadi y la transcribo literalmente a continuación:
Embajador España en Méjico telegrafía para V.E. lo siguiente:
“Carga lleva el ‘Mar Cantábrico’ es la siguiente: ocho aeroplanos traídos Nueva York y numerosas cajas igual procedencia. En Veracruz hemos embarcado, procedentes fábricas y depósitos militares, diez millones de cartuchos calibre 7mm, dos millones quinientos cincuenta mil cartuchos calibre 30, cuatrocientos setenta y nueve mil cartuchos 7,72, cincuenta mil calibre 303, diez mil cien granadas calibre 37 para Hotkes, dos mil ochocientos cartuchos Semang calibre 20, mil seiscientas granadas de 75mm sistema Lanet, ocho mil cuatro granadas calibre 70, dos cañones Hotkis calibre 37, dos cañones Betlem-han calibre 57, once cañones Schenider Lanet de 75, veinticuatro armones y once trenes posteriores para los mismos, seis cañones Serrano calibre 120, dos carros baterías para material de 75 Lanet, 16 cañones completos Mondragón de 70, 25 ametralladoras Colt calibre 7, seis ametralladoras Colt calibre 30, una ametralladora Lewis calibre 303, cinco fusiles ametralladoras Hotkis calibre 7, trece ametralladoras Hotkis 7 mm., cinco fusiles ametralladoras Mendoza calibre 7, mil fusiles Enfield calibre 30, mil fusiles sistema ruso de 7,62, seis fusiles Mauser 7 mm. con trescientos cartujos y cinco pistolas calibre 38 con cincuenta cartuchos. Por apremio tiempo no se pudieron desmontar de sus plataformas y cargar los ocho grandes cañones navío guerra que irán en ‘Motomar’. Salúdole.
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