Revista Ciclismo

Las averías más frecuentes en el cicloturista

Por Rafael @merkabici

Esta sí que es una auténtica pesadilla para el cicloturista. Y es que la ruptura de la cadena suele ser una avería que no tiene solución en la carretera y que resulta, por lo tanto, un momento sin vuelta atrás para tener que llamar a casa y que nos vengan a buscar. Aunque no siempre es así...

Las averías más frecuentes en el cicloturista

Las causas de la rotura de la cadena son muy variadas, pero todas ellas tienen que ver con el desgaste excesivo al que habremos sometido a nuestra cadena. Así, si existe algo de holgura entre los eslabones de la misma o si no está perfectamente engrasada habrá más posibilidades de que se rompa...aunque tienes que tener en cuenta que esto es algo aleatorio...si te toca, te toca.

Por lo tanto, para intentar prevenir esta avería, rezos al margen, no nos queda otra que cambiar la cadena cada pocos miles de kilómetros (tres o cuatro mil sería lo ideal), limpiarla y engrasarla de forma regular, e intentar evitar llevarla demasiado cruzada (esto es, combinando plato grande y piñones también grandes o viceversa).

Como hemos dicho en la mayoría de las ocasiones tener la cadena rota significa la obligatoriedad de llamar a casa para que te vengan a buscar...de hecho eso es lo deseable, porque si haces algún arreglo para salir del paso podrías deteriorar los dientes de plato y piñones. Pero en el caso de que no puedas contar con nadie, es posible arreglar esta avería, bien con un tronchacadenas (herramienta específica que, reconozcámoslo, no todos llevamos encima) o bien haciendo una pequeña chapuza, uniendo la cadena con un pequeño alambre e intentando no ejercer demasiada presión sobre los pedales...pero eso sí, no es nuestro consejo.

Las averías más frecuentes en el cicloturista

Una dirección holgada.

Tener la dirección holgada, notando que la misma no responde a la perfección a lo que le vamos transmitiendo, es otra avería relativamente frecuente. De nuevo la falta de mantenimiento es uno de los grandes causantes de la misma, junto con una potencia demasiado aflojada.

Aquí hay que ser taxativos: si ves que la dirección está realmente suelta tienes que detenerte de inmediato y llamar para que te vayan a buscar, porque realmente te arriesgas a tener una caída grave. Eso sí, si tan solo tiene un poco de holgura siempre puedes intentar jugar con tu llave allen (y esta sí que la tienes que llevar siempre, siempre, encima) y probar a colocarla de nuevo, si no en su sitio, sí al menos de forma adecuada.

En ocasiones tendrás que sacar la tapa que recubre la cruz del manillar, algo que puedes hacer con una llave o una moneda, intentando no rayar la potencia...

Rotura de llanta.

El temido llantazo. Esto sí que es una gran avería. Las causas pueden ser variadas, pero todas tienen algo en común, y es que le has dado un golpe muy grande a la llanta, bien subiendo un bordillo o bien en un bache. Seguramente también lleves la rueda algo baja de presión, lo que ha hecho que el neumático no pudiera absorber todo el golpe.

No importa, el caso es que nos encontramos ante una de esas averías irreparables en ruta, una de esas que te van a obligar a llamar a casa. Para prevenirla intenta llevar siempre los neumáticos con la presión adecuada y procura evitar saltos innecesarios con tu bicicleta.

Mantén los ojos siempre bien abiertos para no comerte baches y deberías poder evitar una avería que no es demasiado frecuente, pero que siempre tiene un arreglo caro e imposible de realizar por ti mismo.

Una cubierta rajada.

Esto también es bastante habitual y puede llegar a ser una causa de repetidos pinchazos. Piensa que cuando la cubierta se raja la cámara queda al aire y sin nada que la proteja de las piedrecitas y demás irregularidades de la ruta. Por eso estamos ante una de las averías más antipáticas que existen en el cicloturismo.

Puede venir provocada por muchas causas, entre ellas haber pasado por encima de algún elemento cortante, como vidrio o una piedra afilada, o tener las cubiertas muy gastadas. Por eso para prevenir esta avería nada mejor que hacer un buen mantenimiento de las cubiertas, cambiándolas cada poco tiempo y no llevándolas nunca al límite de su kilometraje total. Si nos ocurre esta avería en plena salida podemos hacer un pequeño apaño para poder llegar a casa de forma más o menos segura.

Para ello tenemos que llevar siempre encima un trozo antiguo de cubierta, que podemos cortar de alguna cubierta que vayamos a tirar con unas tijeras. Pondremos el trozo de cubierta antigua entre la cámara y la parte de la otra cubierta que está rajada y con eso podremos conseguir que la cámara no vaya directamente sobre el suelo. Es una solución algo chusca pero que funciona, te lo prometemos.

Eso sí, te reiteramos lo que decimos siempre...en la bici estás para disfrutar y no para sufrir. Por eso lo más importante es que nunca, nunca, pongas en peligro tu integridad. Así que déjate de inventitos si ves que pueden no ser totalmente seguros....

Cuando las bielas crujen.

Seguramente que esto te ha pasado más de una vez. Esa sensación de ponerte en pie sobre los pedales, hacer fuerza con tus piernas y escuchar (y hasta sentir) un crujido en las bielas. Al principio puedes pensar que estamos tan solo ante algo molesto, ante un ruido que debes eliminar para poder concentrarte mejor en el esfuerzo. Pero no te engañes, ese crujido puede ser síntoma de una avería más grande, así que no puedes ignorarle.

Las averías más frecuentes en el cicloturista

Normalmente las causas de ese crujido son las propias bielas, más bien que éstas están poco apretadas en el pedalier, algo especialmente habitual en bicicletas nuevas, con lo que apretarlas tras pasar unos centenares de kilómetros será la mejor forma de corregir el defecto.

Si el crujido sigue persistiendo deberemos desmontar la biela y limpiar a fondo el acoplamiento, porque a veces se forman pequeños espacios de óxido allí que pueden llegar a deteriorar la biela. En cualquier caso es una labor delicada y precisa que seguramente sea mejor que le encargues a un buen mecánico de bicicletas.

Las averías más frecuentes en el cicloturista

Manillar suelto.

Este es otro de esos ejemplos en los que debemos de tener todo el cuidado del mundo y detenernos en el mismo momento en que sintamos la más mínima alarma. Y es que llevar el manillar algo suelto puede ser fatal y abocarnos a una caída si no sabemos darnos cuenta a tiempo y gestionar bien el problema.

Normalmente el manillar no "baila", sino que tiene solo una pequeña holgura, que puede venir provocada bien porque la propia potencia esté algo suelta o bien porque se haya apretado demasiado el manillar, deteriorando el tubo. Todo ello se debe de realizar de forma regular y periódica de mano de algún mecánico especializado.

Existen igualmente algunos trucos caseros para intentar corregir este defecto en ruta, pero nosotros insistimos: es tan peligroso que consideramos que llamar a casa o acudir al transporte público son las únicas opciones válidas en este momento...

Saltos en los piñones.

A veces los piñones están mal sincronizados, bien por un excesivo desgaste o bien por algún golpe seco que ha movido el mecanismo y lo ha dejado ligeramente desplazado. Las consecuencias son que la cadena salta entre piñones e incluso puede llegar a rozar el anterior y posterior del que está engarzada, frenando al ciclista y provocando erosiones innecesarias en las piezas de la bici.

La prevención para esta avería viene nuevamente por un cuidado de la bicicleta anual y una serie de reemplazos de cables y casetes cada cierto número de kilómetros. Además, asegúrate de no apoyar nunca tu bicicleta sobre el cambio directamente, ya sea al dejarla en el suelo o al transportarla en una maleta o bolsa.

Si ves que la desviación es molesta a la hora de tu entrenamiento y no quieres llegar a casa con ella puedes tocar los tensores del cable del centro hasta engarzar la cadena correctamente en algún piñón e intentar tirar con ese desarrollo hasta tu domicilio.

Las averías más frecuentes en el cicloturista
report this ad
Las averías más frecuentes en el cicloturista
report this ad


Volver a la Portada de Logo Paperblog