Leí un artículo en EL PAÍS que comenzaba con la noticia de que habían salido a subasta las cartas de amor que Charles Schulz, creador del personje Snoopy, le envió a una joven de 25 años en los años setenta, cuando su matrimonio pasaba por una crisis. Lo curioso no es que Charles estuviera prendado de una chica que no era su mujer, sino que eran cartas ilustradas. Una de ellas comienza con un "Querida y maravillosa Tracey" y a continuación, hay un dibujo de Charlie Brown en la que pregunta con un bocadillo: "¿No es ésta una estupenda manera de arrancar una carta?". El lote epistolar e inédito tuvo un precio de salida de 190.000 euros, quién sabe si por el valor que tienen esas ilustraciones de Schulz o por el puro morbo de leer sobre un amor frustrado.
La cuestión es que me hizo plantearme cosas sobre el género epistolar y me surgió la idea de escribir un post sobre esta manera de hacer literatura. ¿Qué os parece a vosotros leer en forma de carta? Yo apenas he escrito así, por lo que, supongo, este post no contendrá ningún consejo en especial sobre como abordarlo, pero creo que nunca lo he hecho porque me siento bastante limitada, al igual que escribir una novela en forma de diario. Sin embargo, hay muchísimos escritores que lo han utilizado con éxito, por ejemplo, por no irnos a autores como Cela o Dostoyevski que han usado este género en más de una ocasión, un caso cercano que tenemos al que referirnos es: 'Contra el viento del norte' y 'Cada siete olas', de Daniel Glattauer.
Es cierto que en una novela donde la acción se cuenta en forma de carta (y me refiero a una novela íntegra en este estilo, no con cartas entre medias o al principio o al final de cada capítulo), es más complicada de escribir que una en la que no es así. Supongo que es por el hecho de que alguien debe escribir esa carta, nuestro personaje quizá, y para escribir una carta debe reflexionar, sacar sus propias conclusiones, expresar sus opiniones y sus sentimientos, de tal manera que deben ser personajes bastante bien construidos porque de lo contrario podrían quedarse un poco "cojos". Por tanto no sólo se trata de narrar un acontecimiento, sino de narrarlo y que la persona que lo está contando, el autor de la carta, reflexione sobre él.
Más cosas que se me ocurren: ¿se puede escribir una novela entera en forma de una única carta? Es decir, una novela completa en la que no se intercambia correspondencia. Simplemente un personaje, Pepito, se pone a escribirle una carta a otro, Menganito, y esa carta dura todo lo que dura la novela. Pepito le cuenta a Menganito lo que ha pasado pero, supongo, tendrá que dirigirse a Menganito en una segunda persona, hacer algún tipo de alusión a un destinatario. ¿Y si son dos los personajes que se intercambian cartas? ¿Se cuenta la historia desde dos puntos de vista o un personaje conoce lo que ha pasado y le cuenta a otro que no lo sabe? Antes siempre tenía que ser un acontecimiento pasado, por aquello de que las cartas, bueno, tardaban en llegar, pero ahora: ¿se puede considerar una conversación en un chat, de manera inmediata, género epistolar? ¿Son los e-mails el "reinventarse" de este género?
Supongo que muchas de estas dudas acabarían si un día me planteara escribir en forma de carta. Sin embargo, aunque a veces lo he intentado, nunca mi propósito ha llegado a buen puerto. ¿Lo habéis intentado vosotros? ¿Habéis escrito alguna vez una novela en forma de cartas? ¿Qué experiencia tenéis? ¿Qué limitaciones creéis que tiene el género y qué ventajas?
Contadme. Como véis, más que un post sobre escritura, esto es una reflexión en la que, esta vez, soy yo la que pido consejo. Así que animaros a comentar ^^