Se puede ser buen empresario, se puede ser buena persona, se puede ser humilde y agradecido, amigo de tus amigos, trabajador incansable, colaborador, apasionado de tu familia y de tu trabajo. Pero ¿ todo a la vez es posible?
Pues está visto que si.
Ayer veía como a un compañero del primer curso de AERCO-PSM allá por la primavera del 2010 le entrevistaban en El País y hablaba de lo que han supuesto las redes sociales, y en especial twitter, para él y su empresa, destacaba sobre todo lo maravilloso que es poder comunicarse con sus clientes, el tener esa cercanía que hacen que su marca, @agrofuentes se diferencia de las demás, y que la está convirtiendo en un referente del buen hacer en redes sociales
Pero es que hoy me he desayunado con un email de agradecimiento, y se que muchos de vosotros también, porque Daniel Molina es agradecido, y le gusta compartir su éxito y las buenas noticias, y nos ha querido agradecer a todos, a su comunidad, su éxito, éxito que le viene del trabajo y esfuerzo diario al que personalmente creo que he contribuido poco o nada.Y es que Daniel es un pionero, recuerdo cuando en aquella clase nos hablaba de las estrategia de marketing de guerrilla que había desarrollado con su producto y nos dejaba a todos atónitos mostrando el vídeo en el que Buenafuente y Berto le dan en directo un mordisco a una cebolla de Fuentes de Ebro, la única con denominación de origen.
Y recuerdo como surgió #encebollados , el primer concurso de twitter que conocí y con el que todos los miércoles hay una cita, concurso que tuve la fortuna de ganar en una ocasión y recibir mi premio ¡Una caja de cebollas @agrofuentes!
Este es mi pequeño homenaje a Daniel, su trabajo y su esfuerzo