Las Cinco Canciones de Alex (I): “Shine on You Crazy Diamond” (Pink Floyd)
Publicado el 17 octubre 2016 por Raúl Rn
Rocktelegram es uno de los blogs que leo con más gusto y en el que ya quiero comentar prácticamente cuando empiezo a vislumbrar la entrada, desde mi punto de vista lo mejor que le puede pasar a un post. El estilo de Alex es didáctico y ameno, consigue que nos enteremos de cosas en torno al rock que todos hemos visto o vivido, pero a las que él consigue dar un enfoque personal y, a la vez, muy próximo a todos los que, de una otra manera, nos sentimos identificados con lo que estamos leyendo. Sus entradas sobre literatura y rock, quién es quién en cada grupo, las portadas horrorosas, los cinco mejores músicos por instrumento, sus crónicas de grandes conciertos, sus "versiones, diversiones y perversiones", y su acercamiento a los mejores grupos de hard rock, heavy metal y rock progresivo, estilo con el que compartimos pasión, son muy sugerentes y están siempre cargadas de imaginación; si no conocéis este blog ya os adelanto que no os va a defraudar, animaos a seguir sus entradas, cada viernes podréis disfrutar de una nueva. Preparaos para una excelente semana de rock llena de recuerdos, contados como sólo Alex sabe hacerlo. Comenzamos con un tema que también estaba entre las cinco canciones de mi vida: "Shine on You Crazy Diamond", como dice Alex: "la ausencia hecha música".
"Ante todo y antes de entrar en materia, es de recibo agradecer a Raúl que me haya cedido espacio y lectores en La Guitarra de las Musas para hablar de esas canciones que, de algún modo, han significado tanto para mí que las llevo tatuadas en el alma, impresas en los genes ya para siempre; canciones que se fundieron conmigo formando un cóctel compuesto de sonidos, vida y sentimientos del que ya no puedo, ni quiero, desligarme.
Y eso que ni es fácil escoger cinco (¡¡sólo cinco!!) ni, en mi caso, desligarlas de sus discos 'madre'. Suelo decir a quien me quiere escuchar que yo soy más de discos que de canciones, que si escucho suelta, qué se yo, Fragile Dreams de Anathema, inmediatamente me falta el resto del disco, me quedo a medias... Pero bueno, sí que es cierto que siempre hay temas que destacan por su implicación en momentos determinados y esos son los que he procurado escoger.
Y vale, después de este pequeño auto prólogo, vamos allá...
Sólo con escuchar sus primeras cuatro notas ya me traslado a un mundo paralelo. Fue, sin duda, mi primera influencia seria en el mundo del Rock y en el particular universo de Pink Floyd, mi banda favorita desde siempre.
Ya sabemos un montón de cosas de ella, pero que muchos escojamos este largo tema como 'canción' preferida dice mucho acerca de lo que los chicos de Pink Floyd lograron transmitir: algo que subyace a la música y se entierra en lo más profundo de las personas.
Quizá sean sus mágicos acordes o su cadencia inimitable, melancólica y vagamente triste: no lo sé con exactitud, el caso es que Pink Floyd consiguieron imprimir la ausencia en todas sus notas y nos legaron una maravilla que a mí me transporta a lejanas tardes de verano en casa de mi abuela, descubriendo en la penumbra de una oscura habitación esos sonidos que me hablan, hoy más que nunca, de tiempos perdidos, de amigos que se hicieron mayores y de la ausencia de la infancia que encerré entre las armonías de aquellos diamantes mágicos. Preciosos recuerdos depositados en un cofre sonoro que ya solo abro de vez en cuando por temor a que se contaminen de este aire de adultez que me envuelve sin remedio".