Las Cinco Canciones de Salva (II): “Fast as a Shark ” (Accept )
Publicado el 03 mayo 2016 por Raúl Rn
Siempre digo que la comunidad "heavy metal" es de las que más respeto en el mundo de la música; es verdad que tienen unas señas tribales de identidad propias, probablemente las mismas que son utilizadas -por quienes no saben de nada- para demonizar a este colectivo, sin embargo lo que verdaderamente les caracteriza es la pasión que sienten por su música. El de hoy es un gran relato iniciático; estoy seguro que muchos de los que se consideran metaleros se sentirán muy identificados con lo que nos cuenta Salva y con cómo nos lo cuenta. Personalmente, como el mismo invitado de esta semana me has comentado en alguna ocasión, Accept ya son demasiado "jevis" para mí.
"El tiempo pasaba a golpe de riffs y ritmos de batería y así fui descubriendo nuevos y viejos grupos. Conocí gente con gustos afines a los míos y en nuestras conversaciones siempre salía un tema. Nada era lo bastante duro.
Las grandes bandas de los 70 eran un mero recuerdo en la memoria de los aficionados, y poco a poco con el cambio de década las nuevas bandas se iban sacudiendo las influencias psicodélicas y progresivas de los dinosaurios del rock. Judas Priest abandonaron sus épicas canciones de largos desarrollos instrumentales para darle un lavado de cara a su sonido e imagen y con British Steel sentaron las bases de lo que sería el nuevo metal de los 80. Pero British Steel no era lo bastante duro. Queríamos guitarras más duras y afiladas, baterías más aceleradas y voces que te escupieran en la cara.
"Fast as a Shark" de Accept fue la respuesta a todos nuestros anhelos sónicos. Hoy la canción no pasaría ni de lejos el nivel medio de muchas de las bandas más extremas del metal pero hace 34 años, era lo más cafre y duro que podíamos llevarnos a los tímpanos.
Año 1982. La sequía radiofónica y televisiva era casi total con respecto al rock (el termino heavy estaba en pañales por estos lares). Como adolescente que era, necesitaba algo más fuerte que los discos que habitualmente escuchaba. Las estridencias del "Made in Japan" de Purple aunque me hacían vibrar no eran suficientes para calmar a mis más que aceleradas hormonas. Así que escuchar lo que escuché en los 40 principales ese día parecía la respuesta a todos mis anhelos sónicos. Yo apenas escuchaba la radio, pero siempre tenia una cinta preparada en la pletina por si acaso había algo decente que llevarse a los oídos, así que ese día la pongo para ver si suena algo en condiciones, y de repente oigo a la locutora decir "y ahora un poco de autentico heavy metal", esas palabras me hicieron saltar de la cama hacia la pletina. Así que pulso el rec y cual no es mi sorpresa cuando oigo el famoso ¨aidi aido aha¨ con que empieza "Fast as a Shark". Después de dedicarle algún exabrupto a la locutora, del tipo, "será puta la tía esta", pulsé el stop pensando, la imbécil se ha quedado conmigo. No me dió tiempo ni de volverme a sentar cuando el sobrenatural rugido de Udo da paso a ese inolvidable y legendario riff antes de escuchar, ¿que era eso? una batería a doscientos por hora, salté hacia la pletina y volví a pulsar el rec para grabar la canción y escuchar alucinado lo que estaba oyendo. Eso era lo que estaba buscando, guitarras a toda tralla, una batería que te golpeaba sin concesión y una voz que parecía venir de las entrañas de la tierra. Cuando se acabó la canción la locutora dijo que el grupo se llamaba Accept y la canción "Rápido como el tiburón", en aquellos tiempos se traducía todo, hasta en los propios discos venían los títulos traducidos de la canciones debajo de su correspondiente titulo en ingles. El caso es que los días sucesivos no paré de escuchar ese fragmento grabado de la radio hasta que tuve el dinero necesario para comprarme el disco.
El 7 de noviembre de 1983, "Restless & Wild" el disco que contiene este legendario tema pasó a formar parte de mi colección y, en cierto modo, al igual que "Highway Star" de Purple, "Fast as a Shark" cambió mi modo de entender la música".