Desde que abrí la sección de posts a la carta, -destinada a solucionar dudas o a aportar soluciones a preguntas que te rondan por la cabeza en relación al mundo de los eventos-, ha habido un claro tema candente. Un asunto que te trae de cabeza a ti y al resto de lectoras. ¿Puedes imaginarte cuál es? Se trata de todo un reto: mantener el presupuesto de la boda (o de cualquier evento) a raya.
Seguramente esta será la tarea más complicada de lidiar durante todo el proceso de la boda. Y no nos engañemos, centro de generación de disgustos y conflictos. Por este motivo, dispongas del dinero que dispongas, siempre debes trabajar con un presupuesto establecido (aunque éste sea infinito…) de esta manera lo gastaras de manera eficiente e inteligente. Así que coge un papel y un lápiz, y toma nota porque voy a explicarte como debes organizar las partidas de tu presupuesto total.
Primero de todo, anota arriba del todo la cantidad total de presupuesto que habéis pensado en gastaros en ese gran día. Sí lo sé, cada vez que escribes la cifra te dan mareos y es que por menos de 4 ceros es verdaderamente difícil casarse hoy en día (¿por cierto, leíste mi post de sencillas consejos sobre cómo ahorrar fácilmente?). Toma nota de los porcentajes que aproximadamente deben destinarse por partida y anota tus propias cantidades según tu presupuesto total.
El 50% de este presupuesto debes destinarlo al alquiler del espacio y al catering. Ésta va a ser la partida más grande, pero también es uno de los puntos más importantes, sobre todo en las bodas españolas, donde se nos conquista por el paladar ¿verdad?
El 15% deberías invertirlo en la decoración y al diseño del evento. Tienen cabida en esta partida: el alquiler de material de decoración, todos los arts & crafts que quieras realizar y lo más importante: las flores. Los detalles para invitados también se encuentran en esta partida.
Un 10% para el fotógrafo y videógrafo en el caso que queráis hacer ambas cosas. Si no es así dividir el porcentaje en dos.
Otro 10% para el vestido de novia, accesorios, zapatos (incluyendo: maquillaje, peluquería y un largo etcétera…) y el del novio. Aunque seguramente no sea un porcentaje muy equitativo.. Normalmente nos movemos entre 6-4% (chicas versus chicos) o hasta 7-3%.
Un 5% en el dj y toda la gestión de la ambientación musical de la ceremonia y fiesta (si optáis por música en directo puede ser que debáis subir proporcionalmente el porcentaje).
Un 5% destinado a la ceremonia. Es decir: anillos de compromiso y la tarifa que aplique el oficiante o donación, la puesta en escena y decoración del espacio de la ceremonia irá incluída en la segunda partida.
Un 5% destinado a imprevistos. Siempre mantén esta partida, os permitirá ir más desahogados y estar más tranquilos, porque de imprevistos “haberlos haylos” siempre.
A continuación adapta los porcentajes a tus cifras. Utiliza estas partidas como guías a la hora de repartir tu presupuesto, ya verás que gastando eficientemente ¡acabarás ahorrando en muchas partidas!
Obviamente dependiendo de tus prioridades puede ser que los porcentajes cambien ligeramente, por ejemplo si no quieres hacer vídeo, podrás invertir más en detalles para invitados, por ejemplo. O si sueñas con un anillo de compromiso con una cantidad ingente de diamantes, deberás ampliar dicha partida. Pero a grandes rasgos estas son las partidas con las que deberías trabajar.
En este infográfico que he preparado, puedes verlo mejor:
¿Qué es lo que te preocupa del presupuesto?
¿Qué te está costando lidiar más?
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Imagen: Pinterest
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