Revista Europa
Comprar bolsas para cadáveres y cal viva. Guardar armas y municiones en depósitos para el día X. Escribir listas negras de adversarios políticos a quienes eliminar. Dejarse crecer barba y hacerse pasar por refugiados para cometer atentados. Actividades de ocio de algunos funcionarios alemanes. Lo cuento en El Salto.