La Constelación Familiar es el tema que comparto contigo hoy. Se basa en la entrevista que le hice a Mireya Materán, consteladora, neurofacilitadora y consultora en desarrollo organizacional y personal. Además es mi amiga desde hace más de 15 años.
La intención es conocer y mostrar el impacto que tienen las Constelaciones Familiares en la vida de las personas, ¡en la mía! y también para ayudarte a tomar consciencia de asuntos que hasta ahora has pasado desapercibidos.
Es una terapia que consiste en comprender y reconocer cómo los patrones inconscientes (lealtades) con tu sistema familiar te impiden vivir en plenitud. Empiezas a ver tus problemas de otra manera y se generan movimientos internos que te liberan de esas cargas. Y mejoras las relaciones contigo mismo, con tu familia, amigos y compañeros de trabajo.
La constelación es una experiencia sanadora y transformadora. Las personas pueden padecer enfermedades, adicciones, tendencia al fracaso y tener relaciones conflictivas debido a que de manera inconsciente pretenden “resolver” lo que no fue resuelto o asumido por sus ancestros. Los descendientes “cargan” con sentimientos, emociones y repiten destinos o asumen conductas pertenecientes a sus antepasados o familiares actuales.
Mireya Materán, con su experticia, nos explica esta técnica transformadora.
-¿Cómo defines las constelaciones familiares?
- Nunca me ha resultado fácil definir las constelaciones familiares. Ahora sé que esto ocurre porque las definiciones encasillan, restringen y limitan. Las constelaciones cambian y se transforman continuamente. Emergen como una fuerza viva y evolucionan constantemente. En un principio, las constelaciones familiares eran un tipo de psicoterapia que se ofrecía a personas enfermas. El terapeuta intervenía con sus conocimientos para ayudar a la persona. Ahora para mi son una experiencia profunda y liberadora que conduce a la unión y a la reconciliación. Ayuda a sanar relaciones, enfermedades, depresión, adicciones, carencias y diversas limitaciones que tienen su origen en la historia familiar. Pero la manera de hacerlas y el propósito de las constelaciones se transforma constantemente.
-¿De dónde surgió esta técnica?
-Las constelaciones fueron creadas por Bert Hellinger, quien nació en Alemania en 1925. Estudió filosofía, teología y pedagogía. Fue sacerdote y además vivió 16 años como misionero en Sudáfrica con los zulúes, experiencia que marcó su vida significativamente debido al contraste entre su propia cultura y la de los zulúes.
“Pero es trabajando con los guiones de vida de Eric Berne (Análisis Transaccional) que Hellinger empieza sus primeras aproximaciones que luego dieron origen a las Constelaciones Familiares.”
Una Constelación Familiar se puede realizar en grupo o en una consulta privada.
-¿Cómo se configura una constelación?
- Para la configuración de las Constelaciones Familiares no se requiere de la presencia de otros miembros de la familia. La persona interesada en solucionar un problema específico familiar lo plantea ante el constelador o ante un grupo. El constelador, le pide que elija al azar personas del grupo para que representen a miembros de su familia y los coloque en medio del espacio de trabajo del grupo, unos con otros, dejándose llevar, sin pensar. En el caso de la sesión individual se utilizan plantillas para representar a los familiares.
Los representantes (personas o plantillas) tan pronto como han sido colocados, entran en un campo energético que los guía, a través del cual salen las dinámicas ocultas y se desarrollan movimientos que conducen a la reconciliación.
Los asuntos no resueltos son asumidos por los descendientes
Según Mireya “Las constelaciones liberan a la persona. Los representantes entran en contacto con un campo energético amplio y traen a la consciencia algo que va más allá de lo aparente. Muestran lo que está oculto al seguir un impulso que los “mueve”.“Las constelaciones son una experiencia que permite sacar a la luz información, comprender y resolver situaciones cuyas causas se encuentran en las lealtades con los familiares actuales o del pasado. Aquello que nuestros ancestros no asumieron: situaciones no resueltas, sentimientos, emociones, conflictos, responsabilidades, así como miembros de la familia ignorados o excluidos”.
Mireya agrega que durante una sesión se vive lo que Hellinger llamó: “Caminar con el Espíritu”. En vez de llevar nuestra mirada hacia las emociones, los sentimientos y a lo que percibimos a través de ellos, nos dejamos orientar por una fuerza mayor que nos guía.
-¿Por eso dices que es algo muy profundo, que la ciencia no puede explicar?
-Hasta hace poco yo afirmaba que la ciencia no podía explicar lo que ocurre cuando los representantes se sienten como las personas a quienes simbolizan. La constelación encamina hacia soluciones inesperadas que llevan a la unión, reconciliación y sanación. Todo esto es conducido por una fuerza mayor que nos guía. Ante la cual me rindo. Sin embargo, cada vez más surgen nuevas teorías basadas en la física cuántica que permitirían explicar esta experiencia que ocurre durante las constelaciones.También hay avances en la biología que evidencian y permiten comprender cómo las vivencias de los abuelos pueden repercutir sobre los nietos. En fin lo que ocurre no puede ser explicado con la ciencia newtoniana, pero los aportes hechos por la cuántica nos ofrecen un sustento lógico para comprender las constelaciones.
-Cuándo se habla de “Caminar con el Espíritu” ¿a cual espíritu se refiere?
-Al espíritu donde estamos inmersos y que a la vez está en todos nosotros. Es el espíritu que actúa en todos y cada uno al mismo tiempo.
Somos uno
Detrás de todo actúa una fuerza creativa e infinita, no existe nada racional que se le pueda oponer. Porque proviene de la mente universal.
-¿Cómo actúa ahora el constelador, es decir tu misma?
-En cada sesión de constelación permito que esa mente universal guíe y actúe. En ese momento no soy consteladora ni terapeuta. Acepto la realidad tal como es o como fue. Entonces allí se da el milagro porque se liberan fuerzas curativas, que van mucho más allá de la psicoterapia. De pronto todo lo que ha pasado se ilumina y se transforma en algo valioso ¡Lo esencial sale a la luz de manera sorprendente!
Las constelaciones han ido evolucionando mucho y continuamente lo siguen haciendo, y esto se traduce en cambios en la forma de constelar. Son cada vez más el resultado de dejarse guiar y conducir por el espíritu.
Mi testimonio: la enfermedad no es el eje principal de mi vida, es el abandono
Cuando alguien es excluido de un sistema familiar porque por ejemplo está enfermo, abandonó a alguien de su familia o fue abandonado, la dinámica familiar queda perturbada y presiona para lograr una reconstrucción y una reparación. Porque aquel que fue apartado o excluido será imitado más adelante por un descendiente, sin que éste se dé cuenta.
Mi mamá <3"><3"><3
Fui a consulta con Mireya porque creí que tenía un problema de cómo manejar mi enfermedad. En ese momento mis niveles de glicemia subían y bajaban sin causa médica aparente.
No sé cómo, sin proponérnoslo fue saliendo mi recuerdo de dolor por haber sufrido abandono por parte de mi mamá. De alguna manera, mis sentimientos fueron aflorando de una forma inexplicable. La dinámica de la sesión fue orientándome a ver a mi mamá de otra manera que nunca había experimentado… y fueron apareciendo sentimientos profundamente arraigados en mí. Allí fui comprendiendo que mi enfermedad era la consecuencia de tales sentimientos. Porque la relación entre mi madre y yo era hostil, muy dura, yo no le perdonaba el hecho de ella haberme abandonado cuando tenía 11 años de edad. Y de alguna manera yo me había castigado por este sentimiento de odio hacia mi madre durante todos estos años. Experimentar esta terrible enfermedad era parte de ese castigo. Al terminar la consulta sentí unos deseos intensos de abrazar a mi madre, la llamé por teléfono y le expresé: “te quiero mucho mami” con mis ojos aguados…
¿Cómo me va en mi tratamiento médico después de esa sesión? Bueno, principalmente me he sentido muchísimo mejor, cada vez que mis niveles de glicemia se alteran, trato de explorar e identificar las emociones que tengo en ese momento. Y sigo trabajando y reconociendo mis sentimientos no sólo con mi mamá sino con todos los que me rodean. Desde relaciones con mis hermanas hasta relaciones de trabajo y de pareja. Ahora puedo identificar lo que siento cuando tengo a mi mamá enfrente. Su trato es diferente, es comprensiva, no me cuestiona, pero indudablemente ella no cambió, YO cambié, ¡y de qué manera!
Cuatro años después por un hecho “casual” mi sobrina estuvo revisando una maleta que pertenecía a mi papá donde había una fotografía de mi abuela materna. Es importante aclararles que mi mamá nunca conoció a su madre porque le habían dicho que murió al ella nacer. Detrás de la foto había una leyenda dirigida a mi mami que decía: “te quiero mucho Carolina. Tu mamá”. Imagínense como se sintió mamá cuando vio la foto. Resulta que allí estaba explicado el por qué mami repitió el patrón de abandono que ella misma había experimentado sin saberlo y que repitió con mis hermanas y conmigo.
De eso se trata una constelación, las cosas poco a poco son reveladas claramente. Ahora puedo ver sin juicio, lo que hizo mamá. Y la quiero y respeto cada día más.
¿Cómo expresar lo que siento y he descubierto? Por un profundo y eterno agradecimiento a la asesoría de Mireya. En esa única sesión pude experimentar el milagro de sanar la relación con mi mamá. Siempre que converso con Mireya me siento con esperanza y alegría. Gracias a la “magia de las constelaciones” hoy me siento diferente experimentando mi proceso de vida. A partir de ese momento mi camino espiritual se intensificó. Hoy agradezco que la constelación llegara a mi vida.
Si quieres informarte más acerca del trabajo de Mireya Materán visita su página: http://www.mireyamateran.com