En 1944 Jung tuvo una ECM (experiencia cercana a la muerte). A partir, fundamentalmente, del relato de esta experiencia y de las reflexiones que él mismo llevó a cabo sobre la posible vida después de la muerte, indagaremos en estas cuestiones y en las que se derivan de la relación que, según Jung, existe entre el consciente y el inconsciente. Según él venimos a la vida desde un ámbito extradimensional, el propio del inconsciente, e ingresamos en ella de manera semejante a como un buzo se pondría su traje de bucear para meterse en el mar. La función de la vida es traducir a experiencias claras y podríamos decir que asumibles por la razón, la sabiduría informe que en modo potencial contiene el inconsciente. En suma, el sentido de la vida es, en cierto modo, el autoconocimiento.