Generalmente se cree que nuestros pensamientos no tienen relación con nuestras emociones y viceversa, y mucho menos que algunos de los anteriores pueda influir en el bienestar o perjuicio de nuestro cuerpo. Pero mientras tanto centremos nuestra atención en las emociones, es importante percibir como las emociones pueden influir en nuestra salud corporal y definir nuestras futuras acciones, por ende nuestra realidad. Veamos 2 ejemplos muy simples de esto:
Ejemplo A) Laura decide ir a comer mariscos a un restaurante de prestigio, el cual le recomendaron con suma insistencia y hablaron maravillas de éste en especial el platillo de ostiones; por lo que decidida a comprobar dicha recomendación se dirige al restaurante. Al llegar recibe la carta y no sólo ordena una sino dos docenas de ostiones, al recibir su platillo los comienza a comer con gusto y trata de comprobar la alta recomendación referida por sus amigos, pero al pasar varios minutos y no ver lo extraordinario del platillo, su estómago comienza el proceso de digestión y se empieza a sentir un poco mal para poco tiempo después darse cuenta que los ostiones le han causado una infección considerable que la mantendrán en el baño y en la cama por un par de días, para después tener que gastar en servicio médico para restablecer su salud física propiciará una experiencia de antojo y curiosidad bastante desagradable que quedará registrada en su memoria amalgamando 2 emociones específicas: decepción y enojo. Por ende está experiencia hara que Laura no vuelva a probar ostiones por un buen tiempo y definirá cierta opinión referente a los mariscos, en especial hacia los ostiones.
Ejemplo B) Jaime ha estado apartando dinero de su pago quincenal para llevar a cenar a su esposa por motivo de su aniversario, lleva aproximadamente 4 meses porque quiere que su esposa lo disfrute a cabalidad y no haya restricciones en comida y bebida por falta de dinero; consecuencia de su esfuerzo ha logrado reunir una suma considerable de dinero así que el día llega y él junto con su esposa se dirigen al restaurante ha pasarla fenomenal. Al llegar hacen efectiva su reservación cerca del pianista que ambienta el lugar y ordenan con agrado lo que comerán y beberán, justo después de haber terminado la cena el restaurante trae la cuenta y junto con la cuenta una nota que el restaurante ha decidido cobrar únicamente el 50% del total de la cuenta ya que son los clientes #1000 y también por ser su aniversario. Ambos quedan sorprendidos ya que esta experiencia
Es muy claro a través de estos simples ejemplo que las emociones nos atan en determinadas ocasiones y nos limitan en muchos rubros de nuestra vida, pero también en muchas ocasiones nos impulsan, fortalecen o empoderan; por ello es importante saber identificarlas, controlarlas y después saber manejarlas con perspicacia conforme a nuestros intereses.
Por todo lo anterior es indispensable cambiemos nuestra percepción sobre las emociones, y dejemos de percibirlas como la forma en que reaccionamos ante determinadas circunstancias sino empecemos a percibirlas como piedra angular entre pensamientos y salud corporal que nos permitirá tener una vida en plenitud.