Revista Cultura y Ocio
"No, ellas no han cambiado.
Si, siempre son las mismas.
Estrellas de la pantalla, sólo existen para ser vistas una y otra vez, estrellas que brillan para deleitarnos, para deslumbrar nuestros sueños, estrellas cuyo fundamento es la carne que no se ve.
Vamos a estar en compañía de algunas de las criaturas del Maestro."
Un tema recurrente en el cine es el de Hitchcock y sus mujeres rubias, su pasión por rodearse de ellas, por filmarlas y también la atracción que sentía por ellas. Se ha escrito y elucubrado mucho al respecto, es inevitable, Hitchcock ha pasado a la historia como un maestro del cine capaz de poner en tensión al más frío de los espectadores. Por eso, hoy traigo a mi estantería virtual, Las fascinantes rubias del Alfred Hitchcock.
En este ensayo, cuatro serán las rubias objeto de estudio para Koster, quizá las más representativas, las que primero nos vienen a la cabeza cuando hablamos del cineasta: Kim Novak, Eve Marie Saint, Grace Kelly y Tippi Hedren.
A través de estas cuatro mujeres y sus conocidísimas películas, Kesner realiza un estudio que evidentemente bordea lo sexual de las fijaciones del director. Con una prosa a ratos magnífica, y de la que no dudo en repartir parte de culpa al magnífico traductor, Manuel Arranz, nos irá descubriendo las obsesiones de Hitchcock y también, una mirada diferente de escenas ya míticas de algunas de sus películas.
Un meticuloso y nada aburrido análisis de gestos y escenas nos hablarán de una sexualidad controlada, incluso reprimia en sonrisas altivas, de simbolismos en las escenas con otros personajes en los que ni siquiera habíamos reparado. Y, en mi caso, también cambió mi forma de ver a Tippi Hedren, mujer fría que coloca un escalón por debajo de, por ejemplo, Kelly. Bodas, obsesiones, películas con personajes que enloquecen, tensión y sexualidad, mucha sexualidad que evita minuciosamente lo carnal, son los rasgos del análisis que realiza el autor en este título. Una visión que, si bien puede parecernos un tanto anticuada a la hora de interpretar alguna escena, es cierto también que enriquecerá nuestra forma de ver el cine de Hitchcock. Relaciones tortuosas con sus rubias, insinuaciones, declaraciones casi hirientes (o sin casi) pasan por el microscopio analítico de Serge para dejarnos un título francamente interesante que, nos convenza o no en sus argumentos, dará al menos algo en qué pensar al lector.
"¿Por qué elijo mujeres rubias y sofisticadas en mis películas? Buscamos mujeres de mundo, verdaderas damas que se transformarían en prostitutas en el dormitorio."
Alfred Hitchcock a François Truffaut
Y a partir de ahí, que cada cual opine. No obstante, el libro es interesante y puede proporcionar una experiencia nueva a la hora de ver las películas del gran director bajo una perspectiva un poco diferente. Todo es cuestión de ángulos.
Hoy me cambio de lado para haceros la pregunta, ¿Os gusta el cine de Alfred Hitchcock? ¿Tenéis una película suya favorita? Tengo clara una cosa, la mía es Rebeca.
Gracias