Si en algo se diferencia la información periodística de cualquier otra que nos llega a través de las redes sociales u otros de los múltiples canales a los que tenemos acceso los ciudadanos, es que ésta debe ser una información contrastada por lo menos con más de una fuente.
En una encuesta reciente entre algunos periodistas de nuestro país, casi la mitad de ellos declararon que no contrastaban la información con otras fuentes y que publicaban la noticia tal y como les llegaba de una agencia informativa o de una de relaciones públicas, e incluso transcribían casi textuamente las notas que les llegan de las ruedas de prensa. Cuando se observó la realidad en algunos medios de comunicación, sobre todo de ámbito regional, se pudo comprobar que de todas las informaciones publicadas en los medios solo el 20% contenía información compulsada con otros testimonios. O sea que la realidad es que el 80% de las noticias provienen de un solo punto de vista.
Este fenómeno se está ampliando como consecuencia de la degradación de los recursos de que dispone el periodista que está abocado a trabajar en varios temas al día con las premuras del cierre de la edición, ya sea de un diario o de un informativo audiovisual. El hecho de las reducciones de plantillas que vienen realizando los medios de comunicación como consecuencia de la crisis, redunda también enla calidad de las noticias que recibimos. El periodismo profesional corre el riesgo de equipararse al llamado periodismo ciudadano al que nada ni nadie le puede reclamar la veracidad de sus noticias.
Las fuentes ligadas a las agendas de los periodistas siempre habían constituído un valor diferencial del profesional de la comunicación. Hoy parece que los niveles de exigencia de la empresa periodística tiene otras prioridades más efectistas y prácticas: Lo importante es cerrar a tiempo con los menos recursos humanos necesarios y con los sueldos más bajos.
Cuando se quiera reivindicar el papel informativo de los medios de comunicación convencionales frente al de las redes sociales en crecimiento, a lo mejor se llega tan tarde que todo estará mezclado: la información de calidad con la desinformación interesada. Todo será igual. Todos perderemos.