Es cierto que, a grandes rasgos, podemos enterarnos de la trama subyacente y de los acontecimientos que intentan relatarnos, los que sumergieron al mundo en la tremenda crisis económica que se inició en 2008 y que aún dura, pero no es suficiente.
Consiguen salvar la película su interesante reparto coral, en el que destacan un genial Christian Bale y un Steve Carell que parece decantarse cada vez más por el drama que por la comedia. Y, hay que reconocerlo, no se le da nada mal.
El ritmo desenfrenado del film, fruto de un gran trabajo en la sala de edición, y una gran banda sonora, son los elementos que harán que, a pesar de no enterarnos de la mitad de lo que va pasando, no caigamos en los brazos de Morfeo y aguantemos hasta el final sin aburrirnos demasiado. No puedo negar que me sorprenden sus 5 nominaciones a los Oscar y los premios que está recogiendo estos días.
Nota: 5/10