Brian de
Liébana es un monje que ha decidido reconstruir el monasterio de San Columbano
el cual fue construido por el hermano del rey Patrick O’Brien. Este emblemático
lugar esconde secretos que, junto con los monjes que vendrán en ayuda de Brian,
les hagan dudar de si el propio demonio va tras ellos al tratar de desentrañar
todo el pasado oculto tras sus fríos muros de piedra. Dana es una joven que
lleva consigo un terrible pasado relacionado con el rey y sus caballeros y que
gracias a la ayuda de Brian encontrará la paz que un día perdió. Va en busca de
un hijo que la quitaron de su lado cuando era joven.
Cormac
es el rey de la comarca donde se asienta el monasterio y no le facilitará la
construcción del monumento a Brian, construido por su hermano, por razones que
el propio rey no deja ver ni a sus mas cercanos esbirros. El rey tratará por todos
los medios acabar con el grupo de monjes e impedir así la construcción del
monasterio para que nadie sepa la verdad sobre el oscuro pasado que tiene a sus
espaldas. Con un misterioso asesino entre sus personajes que hará que los
monjes sufran cuando menos se lo esperan, de la forma más cruel posible.
Juan
Francisco Ferrándiz ha conseguido una novela adictiva y, conforme avanza. más
oscura e intrigante. Con unos protagonistas con pasados turbios, misteriosos e
increíbles capaces de sorprender. Un historia que atrae desde los primeros
capítulos y que no quieres dejar de leer hasta que terminas el libros. Una
novela fácil de leer que tiene una buena historia, unas descripciones cargadas
de bellos paisajes de los bosques de Irlanda o de tétricas habitaciones de
oscuros castillos. Además la historia tiene varios géneros que hacen de ella
una lectura completa, desde el misterio hasta pequeñas partes románticas,
además de batallas y oscuros secretos.
Recomendado
para aquellos que les guste el misterio, en esta novela tendrán muchas
incógnitas por resolver en sus páginas, también para aquellos a los que les gusten
las novelas sobre la historia de Irlanda o tengan curiosidad de ella. Y por
último para aquellos a los que les gusten los libros de fácil y rápida lectura.
Extractos:
Al observar la mesa comprobó que uno de los
rollos que habían saltado por los aires había ido a parar al recodo donde
habían hallado el cuerpo de Patrick. Se acercó con el candil y lo recogió, pero
cuál no sería su sorpresa cuando notó una leve corriente de aire frío. Al
levantar la vista, reparó en el hueco donde aún reposaba la antigua arca con
las reliquias celtas. Siguiendo un impulso, la arrastró hasta el centro de la
cámara. Observó con aprensión la palabra «Prodictor», una acusación que seguía
torturándole. Sólo él y Michel eran capaces de intuir las implicaciones
ominosas de esa críptica inculpación. Con cuidado, abrió la tapa y observó las
reliquias. Había hecho saber a los druidas su intención de devolverlas, pero
ellos, alarmados, le habían rogado que siguieran enterradas en el sid. La
humanidad actual no era digna de poseerlas, explicaron, y su ausencia podía
desatar las iras de los antiguos dioses.
Habló brevemente con los jóvenes, quienes le
explicaron que Brian había permanecido inconsciente durante todo el trayecto.
Uno de los iniciados encendió el fuego del hogar del antiguo refectorio y lo
tumbaron en el mismo lugar donde él había curado las heridas de Dana.
El tiempo se agotaba. Siguiendo las precisas
órdenes de la joven, depositaron un caldero con agua sobre las llamas y, al
primer hervor, la muchacha dejó caer en él una mezcla de muérdago, espino
blanco y una mixtura de fuerte olor a menta. Tomó la pequeña hoz que Eithne le
había regalado para segar las hierbas del bosque y fue cortando el hábito
ensangrentado. De pronto comprendió por qué no había muerto: un jubón de cuero
claveteado de casi un dedo de grosor protegía el torso y la espalda del monje.
Con cuidado, lo colocaron boca abajo. Aunque la herida en la espalda era profunda.
Editorial: Grijalbo
Autor: Juan Francisco Ferrándiz
Páginas: 656
Precio:21,90 euros
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