En una ocasión hablamos de los edificios de madera de Zakopane, en Polonia. Al otro lado de la frontera, en Eslovaquia, se encuentran sus “hermanas” arquitectónicamente hablando: las iglesias de madera de los Cárpatos eslovacos.
Este conjunto de iglesias fueron construidas entre los siglos XVI y XVIII en un modo que recuerda al de Zakopane, aunque su aspecto difiere bastante. En total hay unas 60, ocho de las cuales son especialmente famosas y forman parte del Patrimonio de la Humanidad. Estas son las iglesias de Hronsek, Lestiny, Tvrdosín, Kezmarok, Hervatov, Ladomirová, Bodruza y Ruská Bystrá.
Cada una de estas iglesias es única y tiene un aspecto único. Tal vez las más espectaculares sean las de la iglesia griega católica, con sus techos en forma de pagoda; mientras que otras tienen la fachada realizada con entramados de madera, como la de Hronsek. Las iglesias de madera son características del este de Europa y pueden encontrarse también en otros países como Hungría, Polonia, Rumanía y Rusia.