Las incorrectas, de Paloma Bravo

Título: Las incorrectas
Autora: Paloma Bravo 
Editorial: Espasa 
Año de publicación: 2019
Páginas: 344
ISBN: 9788467055979
Cuando se publicó el pasado mes de junio, Las incorrectas, la quinta obra de la escritora y periodista Paloma Bravo, me llamó muchísimo la atención. En estos tres meses he visto muchas y muy buenas opiniones y, ahora que lo he leído, lo único que puedo hacer es sumarme a ellas. Esta novela coral tiene como protagonistas a cuatro madres y a sus familias. Eva está felizmente separada de Jorge, con quien tiene una hija, Manu, la única chica de su equipo de fútbol. Sus padres, Miguel y Verónica, son la bondad y el feminismo personificado. Por su parte su hermana Pilar es la representación de la bordería y el egoísmo. Científica e insoportable a partes iguales. Cristina tiene a su ex marido Ernesto en la cárcel e intenta sacar adelante ella sola a su hijo Luis. No es fácil cuando durante muchos años solo has sido una mujer florero. Candela es abogada de oficio, por convicción, porque cree en la justicia y el compromiso, está casada con Julián y tienen dos mellizos, Hugo y Elsa. Por último, Inma vive con su hijo Nico y con su madre. Desde que el padre los abandonó, los tres forman un equipo sólido, unido, fuerte. ¿Y qué tienen en común estas cuatro mujeres con profesiones y estados civiles tan diferentes? Solo una cosa. Que sus hijos juegan en el mismo equipo el Feroz Fútbol Club. Es solo una, pero será suficiente para que las cuatro se hagan amigas. Y juntas, cada una a su manera, formen una red para apoyarse y ayudarse, en el día a día, en la complicada logística de los hijos, en los momentos cotidianos y la rutina, pero también en los momentos extraordinarios, los buenos y los malos. Porque una hija psicópata, una madre bloguera furiosa, una hermana egocéntrica, una muerte o una condena en la cárcel no son fáciles de llevar. Pero todo es más llevadero con amigas, con juergas, con grupos de WhatsApp. Y, sobre todo, con rebeldía y ganas de pelear, con sinceridad, sin secretos y, por supuesto, con muchísimo sentido del humor. Así, la amistad puede con todo. Se trata de una novela contemporánea, actual, fresca, divertida, vital, disparatada. Llena de ternura y de emoción que, en mi caso, os lo confieso, ha conseguido sacarme alguna que otra lagrimilla. Pero también hay mucha crítica social, mucha ironía, que no cinismo. Es una obra feminista, en la que el feminismo actual está muy presente. Pero que nadie espere un ensayo, un tratado feminista. Es feminista porque habla de mujeres reales. Mujeres que comparten con sus familias y sus amigos sus alegrías y sus penas. Que luchan cada día en sus casas, en sus trabajos. Que defienden a sus maridos y, por encima de todo, a sus hijos. Mujeres que no saben muy bien quiénes son pero sí tienen muy claro quiénes quieren ser. Le pese a quien le pese. A su manera. Aunque no sea la correcta. Mujeres que se dividen entre sus sueños, sus pesadillas, el cuidado de sus hijos y el de sus padres. Y siempre, cada día,con el lastre de la culpabilidad. Esa que nos nace en el momento de dar a luz y que ya nunca nos abandona. Culpables por dar prioridad a nuestra carrera profesional. Culpables por anteponer la crianza de nuestros hijos al trabajo. Culpables por no llegar a todo. Culpables por intentarlo. Culpables por querer tiempo para nosotras. Para intentar estar a solas. Con nuestros pensamientos. Culpables porque, hagamos lo que hagamos, siempre habrá alguien que nos juzgue. Que nos haga sentirnos juzgadas. Por no ser perfectas. Ni falta que nos hace. Y eso es precisamente lo más valioso de esta historia. Que con buen rollo, con unas tremendas ganas de vivir, anima a ser mejor, a ser feliz pero, sobre todo, a ser fiel a una misma. Libres y coherentes con nosotras mismas. Sin importarnos lo que la sociedad espera que hagamos o nos impone. Basta ya. ¿Quién quiere ser perfecta pudiendo ser incorrecta? Si te interesa el libro puedes encontrarlo aquí.