Revista Salud y Bienestar
Según una nueva investigación presentada hoy en la Conferencia de Diagnóstico Temprano del Cáncer del Reino Unido en Birmingham. Aunque las infecciones urinarias no están directamente relacionadas con el cáncer, el hecho de que un médico no controle infecciones recurrentes o la presencia de sangre en la orina podría llevar a un diagnóstico tardío del cáncer, especialmente en mujeres. Las infecciones urinarias son la segunda condición más común para la cual los médicos prescribimos antibióticos, pero en algunas personas, los síntomas de una infección urinaria pueden enmascarar el cáncer de vejiga o riñón. Sólo una pequeña cantidad de pacientes con síntomas persistentes e infecciones urinarias recurrentes continuarán desarrollando cáncer, pero es importante que sean vigilados. El próximo paso será encontrar una manera de detectar en estos pacientes el cáncer en forma temprana para brindarle las mejores opciones de tratamiento y mejorar la supervivencia. No hay una manera fácil de saber qué pacientes deben ser remitidos o vistos nuevamente, por el médico general una investigación como esta, destacando dónde se deben realizar mejoras, son muy útiles para organizar mejor una revisión.