Los jardines formales, son históricamente jardines donde se puede pasear, sentarse y disfrutar del paisaje, son jardines más visuales que activos.
Jardín con forma de cruz
La disposición con forma de cruz consiguen dirigir la vista del visitante al fondo del jardín, y realmente son más utilizados en jardines de un gran tamaño. En muchas ocasiones se suele aportar un punto focal en el centro del jardín, precisamente para acortar el campo visual.
Jardín con forma de aspa
Otra opción para utilizar líneas rectas en el diseño de jardines, es la disposición en Aspa. Aunque la simetría sigue siendo la base de este jardín, las líneas diagonales aportan más movimiento que la estructura del jardín en cruz y dependiendo de su utilización (si es para todo el jardín o sólo una zona), puede ser la base para un jardín informal, más asimétrico. La mayoría de los diseños con líneas rectas son más indicados para jardines grandes, pero este puede ser utilizado en otros de menor tamaño.
Rectángulos superpuestos en un jardín
Con las líneas rectas es fácil crear figuras geométricas que crean bloques, por ejemplo uniendo rectángulos de distinto tamaño. El jardín sigue siendo formal, pero es mucho más dinámico. Si queremos aportar formalidad a un jardín pequeño y que a la vez resulte dinámico, esta es la forma ideal.
Estas son líneas rectas usadas en la creación del conjunto del jardín, pero no necesariamente son las únicas posibilidades de las líneas rectas, se pueden utilizar dentro de un jardín informal para un sendero que queramos aportar profundidad, o en combinación con líneas curvas para que no resulten tan duras o al contrario para aportar formalidad a una zona de un jardín demasiado "natural".