Algunos datos son reveladores y explican las tendencias y el futuro inmediato que nos espera. Las empresas de Estados Unidos ocupan la lista de las 50 compañías más grandes del mundo por su valor en Bolsa al cierre de 2015. Esto no sucedía desde el año 2002 y refleja la importancia e influencia de las empresas estadounidenses en todo el mundo.
Se habla mucho acerca del peso de Europa y China, pero los datos son tozudos y señalan una realidad incontestable: Estados Unidos lidera el mundo empresarial en todo el mundo con una claridad apabullante. La pujanza de empresas norteamericanas de tecnología, como Apple, Amazon, Google o Microsoft, explican en parte este dominio global.
2016 presenta un panorama en el que las empresas estadounidenses disfrutan de un liderazgo arrollador, mientras que las compañías europeas y chinas, lastradas por la incompetencia, la ineficacia, en ocasiones prácticas corruptas y falta de flexibilidad laboral, comercial y escaso desarrollo tecnológico, han sido expulsadas del top ten, y países como Brasil, Rusia o Australia, donde campa la corrupción (sobre todo en los dos primeros) ya no tienen representación entre las firmas más valoradas.
A esto se le llama dominio empresarial estadounidense y se consigue haciendo trabajo de calidad, innovador y competitivo.
Apple, Google y Microsoft son las compañías más valiosas del mundo. Todas estas empresas tienen algo en común: representan el poder de Estados Unidos y de la tecnología estadounidense. De los 50 gigantes bursátiles del mundo, 33 son de Estados Unidos. Y del medio centenar, 14 son empresas tecnológicas. En los 10 primeros puestos, además de Apple, se encuentran Google, Microsoft, Amazon y Facebook.
Otros pesos pesados, nos tecnológicos, como Berkshire Hathaway, Exxon Mobil, General Electric, Johnson&Johnson y Wells Fargo, se mantienen en el top ten por su valor en bolsa.