(Los acentos fueron obviados por
cuestiones tecnicas)
Las nanoparticulas ayudan a
combatir las enfermedades infecciosas.
Cientificos de la Universidad de Salamanca, en España, han analizado las
aportaciones de las nanoparticulas en la lucha contra las enfermedades
infecciosas. En un articulo publicado en la revista cientifica Journal of
Controlled Release que revisa cerca de 300 investigaciones recientes, los
expertos destacan que la utilizacion de estas diminutas particulas como
portadoras de farmacos mejora la efectividad de los tratamientos. Uno de los
aspectos mas relevantes es que el uso de nanoparticulas puede ser una buena
estrategia para combatir las resistencias que presentan bacterias y virus a
los tratamientos habituales, un problema creciente.
“Las nanoparticulas son portadores de farmacos que mejoran la selectividad
del tratamiento, con ellas se localiza mejor donde liberar el farmaco y
ademas se hace de forma mas eficaz porque aumenta su concentracion en el
lugar preciso”, explica a DiCYT Jose Martinez Lanao, catedratico del
Departamento de Farmacia y Tecnologia Farmaceutica de la institucion
academica salmantina. Gracias a su pequeño tamaño –entre 1 y 100 nanometros–
pueden incorporar sustancias que facilitan el reconocimiento de las celulas
y los tejidos.
Generalmente, una nanoparticula se liga a un agente antimicrobiano, es el
vehiculo que lo transporta, pero tambien hay nanoparticulas que tienen
actividad antimicrobiana por si mismas, como las de plata y otros metales y
algunos polimeros. Las propias celulas del cuerpo humano tambien pueden ser
utilizadas como nanosistemas. De hecho, este equipo de la Universidad de
Salamanca ha trabajado con eritrocitos, los globulos rojos de la sangre, que
se pueden utilizar para encapsular farmacos y transportarlos a distintos
lugares del organismo. Actualmente, estos investigadores trabajan en el uso
de nanoparticulas metalicas para vehiculizar farmacos antiinfecciosos.
La lucha contra bacterias como las pseudomonas y contra virus como el VIH
acapara buena parte de las investigaciones relacionadas con enfermedades
infecciosas, aunque el uso de nanoparticulas esta mas desarrollado en otros
campos, como la oncologia.
Nanoparticulas de plata. (Foto: UN)
Las terapias basadas en nanoparticulas permiten “cambiar el esquema de
administracion” en cuanto a dosis y frecuencia, ya que modifican algunas
caracteristicas de los farmacos tradicionales. No solo mejoran la
distribucion del tratamiento, sino que tambien aumentan la permanencia del
farmaco en la sangre. Asi, “hay medicamentos convencionales que hay que
administrar cada ocho horas, pero con este sistema el intervalo podria
aumentar hasta las 24 horas”, pone como ejemplo Martinez Lanao.
Aparte de este cambio, para los pacientes, que un tratamiento este basado en
nanoparticulas no supone una gran diferencia, ya que el modo de
administracion es tan variado como en los farmacos convencionales, por via
intravenosa, subcutanea, intramuscular o nasal, entre otras.
Los investigadores destacan en este trabajo la utilidad de esta estrategia
para afrontar el problema de las resistencias a los tratamientos
convencionales, especialmente grave en los hospitales, donde los germenes se
han adaptado y consiguen sobrevivir a los farmacos. “Los macrofagos son
celulas del sistema inmunitario que eliminan bacterias y virus, pero hay
algunos que son capaces de sobrevivir dentro del propio macrofago, donde los
antibioticos administrados de forma convencional no consiguen penetrar. Sin
embargo, con un nanosistema si se posible llegar a ellos”, explican los
expertos.
A pesar de sus ventajas y de que existen muchos estudios y ensayos clinicos,
apenas hay en el mercado una decena de tratamientos para enfermedades
infecciosas basados en nanoparticulas. “Administrar durante mucho tiempo
ciertos tipos de nanoparticulas, como las metalicas, puede generar problemas
de toxicidad y esto ha limitado su comercializacion”, apunta el cientifico.
Ademas, la fabricacion de este tipo de sistemas es mas complejo y costoso.
El problema se encuentra sobre todo en los tratamientos cronicos, ya que
algunos componentes se pueden acumular en determinados tejidos y dar
problemas a largo plazo.
Por otra parte, las nanoparticulas tambien pueden ser muy utiles para el
diagnostico de enfermedades. “Pueden portar anticuerpos que reaccionan ante
un virus o una bacteria de forma que permiten reconocer que tipo de
infeccion tiene un paciente”, apunta Hinojal Zazo, primera firmante del
articulo.
(Fuente: Jose Pichel Andres/DICYT)
Leido en NCyT