El pozo que mostramos en este reportaje, se encuentra en Urkiola, zona que hemos visitado hace unos días y de la que iremos conociendo más historia en próximas entradas.
Debe ser posterior al siglo XVII, aunque la utilización de la nieve para la conservación de alimentos se remonta a épocas muy lejanas.
Las neveras de montaña son hondonadas donde se almacenaba la nieve para la elaboración del hielo. Las primeras neveras se crearon utilizando simas naturales, pero pronto se excavaron en las laderas de los montes, como en el caso de Urkiola, que alcanza los seis metros de profundidad.
Estuvo en uso hasta principios del siglo XX, y la nieve se usaba, entre otras cosas, para hacer los helados de la romería de San Antonio, que tanto fervor popular tuvieron en el pasado.
En los meses estivales se trasladaba la nieve a las neveras municipales de Durango y Vitoria, desde donde se comercializaba, o a las pequeñas neveras domésticas abiertas en las casas del entorno, como la que se conserva en el Ecomuseo.Reportaje gráfico: "Curiosón".