Las pérdidas por el incendio y la declaración del estado de guerra en Santander

Las autoridades establecieron un cuartel general en el Café Boulevard,

Según los cálculos,las pérdidas ocasionadas por el siniestro ascendieron a más de 250 millones de pesetas;del edificio del Banco de España, en gran parte destruido por el fuego, se consiguió salvar el dinero con los valores, la documentación y el archivo.

Se promulgó en la ciudad y en la provincia un bando declarando el estado de guerra.

Destrozado el centro, las autoridades montan un cuartel general en el Café Boulevard, allí se reunieron todas las autoridades de la ciudad, el gobernador civil, Carlos Ruiz García, el gobernador militar, coronel Burgués, el coronel del Regimiento de Infantería, Molinera, el alcalde, Pino, el presidente de la Diputación, Nárdiz, y el delegado de Orden Público, Norte. Ponen el vigencia las leyes de estado de guerra, comienzan a impartir órdenes para intentar limitar el las consecuencias del desastre.Declarado el Estado de Guerra, se acordó que la Policía, Guardia Civil, Ejército y Bandera de Choque de Falange se encargasen de su cumplimiento. El caos y el derrumbamiento de los postes de las redes telegráficas y telefónicas, además del estado lamentable de las carreteras, además de la imposibilidad de que ningún tren llegase a la ciudad, hicieron que Santander se encontrase sola durante mucho tiempo, sin ninguna ayuda exterior.

Todos los vecinos tenían la obligación de facilitar alojamiento a las personas que habían quedado sin él y sin víveres. El crucero 'Canarias' llegó con las primeras ayudas para los afectados, y con sus generadores dio luz de emergencia a la ciudad, pues los tendidos aéreos habían quedado destrozados.