Cuando uno cree que ya lo ha visto (casi) todo en materia educativa, siempre aparece quien te pone los pies en la tierra y te demuestra que la realidad supera la ficción.
El sistema es mejorable, qué duda cabe: suele utilizarse como arma arrojadiza electoral, presenta lagunas y desigualdades; tiene pendientes retos que afrontar: adaptarse a la realidad sin olvidad su objetivo de formar ciudadanos libres y comprometidos; debe ser el primer frente de batalla contra la estupidez y la incultura; tiene que aportar conocimientos y hábitos; favorecer la comprensión y la expresión; ha de conseguir la formación integral de las personas en todos los aspectos, humanos e intelectuales; debe perseguir la transmisión de la cultura a todos los niveles, a través de las diferentes materias, que le den al estudiante recursos suficientes para desenvolverse adecuadamente en la vida; debe ser plural y audaz, estar al día y ser la vanguardia del conocimiento, la ciencia, la cultura…
Pero héteme aquí que todavía es posible encontrar movimientos cavernícolas, salidos de lo más rancio del desconocimiento, contrarios absolutamente a los objetivos antes citados; movimientos restrictivos, castradores intelectuales, vieja guardia con anhelos retrógrados, dinosaurios no extintos del intelecto, que todavía se manifiestan de esta forma:
Las autoridades educativas llevan el porno y la masturbación a la escuela
¡Esto se tiene que acabar!
Limpia ahora de perversiones el sistema educativo
Los profesores obligan a niños de 12 años a examinar detenidamente revistas pornográficas en clase. Eso está sucediendo ya en España. Los profesores obligan a los niños en clase a hablar de masturbarse.
El porno ha llegado a la escuela donde llevamos a nuestros hijos...
En las aulas ya ha entrado la masturbación como materia de aprendizaje. Los profesores hablan sobre el tamaño del pene y recomiendan que los críos empiecen cuanto antes a mantener relaciones sexuales.
Por razones estrictamente de SEO, no les podré el enlace a la página de donde salen estos exabruptos. Pero si realizan una sencilla búsqueda en internet por cualquiera de sus soflamas, les aseguro que la encontrarán.
Algunos de mis amigos, digitales y analógicos, son profesionales de la educación. Seguramente ellos serán las voces autorizadas para hablar del tema.
Pero no me resisto a denunciar esta corriente de "pensamiento", pestilente desde el punto de vista intelectual, militante vocinglera, que supone un insulto a la inteligencia de los estudiantes, de los profesionales, de toda la sociedad.
Supongo que la frase "cualquier tiempo pasado fue mejor" cobra su auténtico sentido para esta gente y sus secuaces. La resistencia al cambio y los planteamientos mesiánicos y reaccionarios han gobernado el mundo demasiado tiempo. Y se resisten a abrir los ojos.
Y la mente.
Yo objeto a la ignoracia.
Y no me resisto a dejarles una sugerente imagen, muy apropiada al tema que nos ocupa, provocadora a la par que irónica, por si, accidentalemente, caen en este blog.