Algunas ya se han hecho realidad y otras podrían hacerlo pronto
Cuando en 1994 Bill Gates adquirió por 30 millones de dólares el Códice Hammer (también conocido como Códice Leicester) de Leonardo Da Vinci, se confirmó algo que une a estos dos genios, a pesar de los siglos que le separan: su capacidad para anticiparse en el tiempo, para prever y concebir ideas que nosotros los normales ni siquiera imaginamos.
Esto explica el don que desde siempre ha mostrado el fundador de Microsoft para realizar predicciones sobre nuestra vida futura. En su momento, Gates adelantó, por ejemplo, que algún día tendríamos a mano páginas web de comparación de precios, que andaríamos por el planeta con teléfonos capaces no solo de servir para hacer llamadas, y que en determinado momento veríamos aparecer las redes sociales.
En la reciente Conferencia de Seguridad en Múnich, el magnate estadounidense alertó sobre la posibilidad de que la tecnología moderna se convierta en una fuente de virus, no solo de los que atacan a los sistemas operativos de las computadoras, sino de
En 2014, en el marco del Foro Económico Mundial de Davos, Suiza, Bill Gates reiteró algo que ya había dejado por escrito en una carta pública que emitió la fundación que preside junto a su esposa: que para el año 2035 prácticamente no habría países pobres en el mundo.
En 2015, en la carta que cada año hace pública su fundación, Bill Gates opinó que la banca móvil es una de las mejores cosas que se han inventado para ayudar a la gente a salir de la pobreza.
Nuevamente en su carta anual de 2015, Gates adelantó que el sector de la agricultura en ese continente aumentará en un 50% su productividad hasta el año 2030, convirtiéndolo en autosuficiente.
En 2010, en su charla TED, el cofundador de Microsoft advertía sobre la necesidad de la humanidad de alimentar todos los sectores de la economía con fuentes de energía libres de emisiones de carbono.
En 2014, en una reunión del A.E.I., American Enterprise Institute (Instituto Americano de Empresa), Gates se refirió a la revolución robótica, la cual en unos veinte años modificaría sustancialmente la demanda de trabajos, especialmente para aquellas ocupaciones más sencillas y básicas.
Para entonces, la tecnología reduciría la demanda de este tipo de puestos de trabajo, que serían asumidos por robots.
Esto tiene en cuenta la creciente inversión de no pocos países en el desarrollo de este sector: Corea del Sur invierte 100 millones de dólares anuales, Japón destinará 350 millones en los próximos diez años, la Comisión Europea ya desembolsó 600 millones y planea colocar 900 millones más hasta el año 2020, mientras los Estados Unidos dispone de 2.800 millones de dólares para esta ciencia.
Para evitar esa inminente pérdida de puestos de trabajo, Gates ha propuesto imponerles impuestos a los robots con el fin de financiar la creación de más empleos.
Cinco años más tarde, este empresario filántropo insistió en que para 2030 la mayoría de la energía tendría su origen en fuentes renovables, como la solar o la eólica.
"Si el mundo encuentra una energía limpia y barata, podrá hacer más que el cambio climático, podrá transformar las vidas de millones de familias pobres", enfatizó.
De hecho, él mismo anunció que duplicaría su inversión en energías renovables en los próximos cinco años. Hasta ese momento, Gates había dedicado unos 1.000 millones de dólares en ese sector, pero anunció que en el siguiente periodo su presupuesto sería de 2.000 millones aproximadamente.
En nuestros días, el continente importa anualmente alrededor de 50.000 millones de dólares en alimentos, a pesar de que el 70% de los residentes en el África subsahariana son agricultores.
"En los próximos 15 años, sin embargo, las innovaciones en la agricultura borrarán esta absurda ironía", destacó Gates. "El mundo ya ha desarrollado mejores fertilizantes y cultivos más productivos, nutritivos y resistentes a la sequía y las enfermedades; y con acceso a estas y otras tecnologías existentes, los agricultores africanos podrían, en teoría, duplicar sus rendimientos".
"En la actualidad, más de 2.000 millones de personas no tienen acceso a los servicios financieros, lo que limita severamente su capacidad de ahorrar, invertir y participar en la economía formal -expresó-. Pero esto está cambiando a gran velocidad".
Según el multimillonario estadounidense, los sistemas bancarios electrónicos permitirán a los sectores más pobres de la población almacenar y proteger el dinero en banca digital.
"Para el año 2030, dos mil millones de personas que no tienen una cuenta bancaria hoy almacenarán dinero y pagarán con sus teléfonos", vaticinó.
Gates aseguró que los 35 países actualmente clasificados por el Banco Mundial como naciones de bajos ingresos dejarían de ser pobres en las próximas dos décadas.
"La creencia de que el mundo está empeorando, de que no podemos remediar la pobreza extrema y las enfermedades, no sólo es errónea. Es dañina", escribió Gates. "En todos los aspectos, el mundo está mejor de lo que ha estado nunca. Dentro de dos décadas, estará aún mejor".
virus más reales, más vinculados al ser humano, capaces de provocarle la muerte a millones de personas en muy poco tiempo.
"La próxima epidemia podría originarse en la pantalla del ordenador de un terrorista en un intento de aprovechar la ingeniería genética para crear una versión sintética del virus de la viruela o una variedad super contagiosa y mortal de la gripe", aseguró.
"Los epidemiólogos dicen que un patógeno con rápida propagación por aire puede matar a más de 30 millones de personas en menos de un año", concluyó.
Estas son algunas de las predicciones anunciadas por Bill Gates, a las que las revista Forbes les ha dedicado uno de sus espacios: