Néstor García Iturbe.─ Para tratar de entender en algo las acciones que el presidente Donald Trump realiza casi a diario, es importante tener una idea de cuáles son sus prioridades, pues regularmente, las acciones que un país realiza como parte de su política exterior, están vinculadas a las situaciones interna que el mismo intenta resolver.
En mi criterio, la principal prioridad de Trump radica en las elecciones que se efectuarán en noviembre del 2018.
Trump aspira a mantener la mayoría en el Senado y en la Cámara de Representantes, pero con una composición distinta a la que estos cuerpos tienen en la actualidad, con el fin de tratar de sacar de los mismos a los republicanos que no están de acuerdo con su política y que han sido los principales culpables de que varias de las legislaciones presentadas por el presidente no fueran aprobadas, o sufrieran serias modificaciones para lograr su aprobación. Trump quiere una mayoría totalmente incondicional que le permita seguir adelante con sus planes.
La tarea de Trump no es fácil, pues muchos Congresistas, de sólida base de apoyo dentro del partido, con un largo historial y prestigio, han planteado que no se presentarán en las próximas elecciones, muchos de ellos por discrepar de las ideas del presidente, por lo que Trump tendrá que encontrar alguien que aspire, pero con posibilidades de triunfo distintas a las de un político tradicional que ha estado en el Congreso durante años. Esto fortalece las aspiraciones el partido demócrata, que tendrá un contrincante más débil en ese Estado.
De acuerdo con lo expresado, suman cuatro los Senadores republicanos que han decidido retirarse de la contienda electoral. En cuanto los republicanos miembros de la Cámara de Representantes, la cifra es mayor, pues totalizan cerca de veinticuatro. Debe tomarse en consideración que un número de Senadores no necesitan reelegirse hasta el 2020, así que aún pueden quedar en el Congreso voces disidentes con Trump.
.Algunos de los Congresistas que han declarado no aspirarán representan Estados importantes, por lo que sus acciones pudieran también reflejarse en las elecciones del 2020 donde Trump seguramente aspira a ser reelegido. Dentro de los Congresistas que hasta este momento han planteado no continuar en sus cargos, están:
Los Senadores republicanos Bob Corker, de Tennessee y Jeff Flake de Arizona, ambos críticos de Trump, a lo que podeos agregar a Lindser Graham, cuyo cargo no se discutirá en las próximas elecciones, pero que también se ha distinguido por no coincidir con las ideas el presidente.
Entre los republicanos miembros de la Cámara de Representantes, podemos mencionar a Ryan Costello, de Pennsylvania que atribuyó su decisión a la frustración que Trump había creado en él. Otro del mismo Estado, Charlie Dent planeó que la política de la administración era desestabilizadora. El estado de Pennsylvania es importante en las elecciones.
Siempre quedarán en el Congreso, dentro del partido republicano, voces que se opongan a las ideas de Trump, como la del representante Trey Gowdy, de Carolina del Sur, Presidente del Comité para la Supervisión y Reforma del Gobierno, cuyos comentarios hacia Trump no han sido favorables.
El Senador republicano Rand Paul de Kentucky declaró su oposición al nombramiento de Gina Haspel como Director de la Agencia Central de Inteligencia, a lo que se sumó , en este caso un demócrata, John Turner de Dakota del Sur, el que dijo la discusión de este caso llevaría mucho tiempo, en resumen, para no llegar a resultado alguno.. Otro que plantea se involucrará en el asunto es el Senador republicano John McCain, de Arizona quien ha planteado preguntará a Haspel sobre su vinculación en los métodos de tortura desarrollados durante la administración Bush.
Estos ejemplos nos permiten definir que en realidad las elecciones de noviembre del 2018 tienen que ser una prioridad para Trump, sobre lo cual está trabajando, pues el está consciente del asunto y la necesidad de resolverlo para continuar son sus planes y garantizar la reelección del 2020 si todo le resulta favorable.
Trump ha logrado mantener el desempleo en el 4,1 por ciento, algo beneficioso para sus aspiraciones. Dentro de esto también ha disminuido el desempleo entre los ciudadanos de la raza negra, que de cerca del 14 por ciento, se encuentra en el 6,9 y algunos de sus planes como el relacionado con la superestructura y la continuación del muro, deben proporcionar un buen número de empleos, algunos como el muro, a latinos.
Las inversiones que algunas empresas, principalmente automovilísticas, tenían planificadas en México, debido a las tarifas que Trump anunció para los autos, se comenzaron realizar en Estados Unidos, incluyendo una fábrica de la Toyota que fue anunciada radicaría en Alabama, estado que no tiene tradición en la fabricación de automóviles, pero que tiene un alto desempleo de ciudadanos de la raza negra.
Trump está asegurando un factor importante según los politólogos estadounidenses, si hay empleo, dinero y buena vida, no importa lo que sucede en el exterior. Eso es parte de la filosofía de la mayoría del pueblo estadounidense. Siempre habrán grupos de izquierda que protesten, personas honestas que no estén de acurdo con la guerra y otros desmanes del gobierno, pero el sistema prevalece sobre ellos.
La situación de las elecciones se complica con la imposición de tarifas a China y la guerra comercial que esto ha originado. Inicialmente la administración Trump anuncio la imposición de tarifas por 50 billones de dólares a los productos chinos y ante la respuesta China imponiendo tarifas por ese mismo importe, Estados Unidos subió la parada hasta 100 billones.
Esta situación afecta productores de frijol de soya y carne de puerco de Minnesota, Indiana, North Dakota y Missouri. También a los productores de maíz de Nebraska, Minnesota a Indiana, al igual que productores de carne de res de Nebraska, Missouri, Wisconsin, Montana, Minnesota, la Florida y los de trigo de Montana.
Los demócratas consideran que pueden aprovechar esta situación para las próximas elecciones, entro de ellos se encuentran ClaireMcCaskill de Missouri, Tammy Baldwin de Wisconsin, Joe Donnelly de Indiana, John Tester de Montana, Bill Nelson de la Florida y Heidi Heirkamp de North Dakota, todos ellos aspirando en Estados que fueron ganados por Trump en las elecciones pasadas y donde el efecto de las tarifas pudiera cambiar el voto de una buena parte de la población, esto se calcula también afectaría las aspiraciones del senador republicano por Nebraska Deb Fisher.
La famosa guerra económica requiere un análisis particular, además de este preliminar que hemos realizado, de cómo la misma puede afectar las elecciones en distintos Estados de la Unión. Trump puede estar utilizando sus habilidades como comerciante en el desarrollo de los acontecimientos, con el fin de llegar finalmente a un arreglo que resulte beneficioso para Estados Unidos, pero lo que piense hacer, debe hacerlo lo antes posible, con el fin de que este asunto influya lo menos posible en el resultado de las elecciones de noviembre.
El sabe que no está en las mejores condiciones para noviembre y que el resultado del escrutinio pudiera tener efectos negativos para sus planes futuros.