Las productoras Imira y El Terrat, en negociaciones

Con la salida a Bolsa de Thinkia la producción de animación se ha puesto de moda. Imira Entertainment es la segunda empresa española de un sector intensivo en capital humano y por tanto generador de muchos puestos de trabajo. Fundada en 2003 dispone de oficinas en Barcelona, Madrid y Vitoria.
A diferencia de otras productoras que se han centrado en un mercado o producto, Imira, propiedad de 3 socios (Carlos Hercilla, Míriam Ballesteros y Sergi Reitg que ejerce de director general), tiene dos líneas de negocio, la producción propia de series y largometrajes que ha conseguido vender a más de 200 países, y la distribución en España y otros países de producciones ajenas.
En los ocho años de vida llevan invertidos unos 25 millones de euros en media docena de producciones. Muchas de ellas han sido coproducidas con otros países. En la actualidad tienen seis proyectos más en marcha que aún no han visto la luz. Como dice Reitg, “este negocio tiene un ciclo de vida muy largo. Si una serie tiene éxito puede vivir 70 años. Si no lo tiene tan solo cinco”.
Expansión
En los planes de expansión de Imira se contempla la posibilidad que la animación no sea la única actividad de producción y ampliar al campo de la realidad. En esta línea, se han establecido conversaciones exploratorias con algunas productoras privadas catalanas entre ellas El Terrat la productora de Andreu Buenafuente después que éste junto a sus tres socios recomprara la empresa, a principios de 2009, después de haber llegado a un acuerdo de venta tres meses antes a Banijay Entertainment.
El Terrat, con un negocio superior a los 40 millones de euros, nunca ha tocado el campo de la animación siendo Imira un segmento muy complementario e interesante para completar su porfolio de productos que incluye, además de series y programas para la televisión, Internet, teatro, publicaciones, marketing y eventos. Recordar que El Terrat posee, además, el 8,25% de Gamp Audiovisual que a su vez controla el 51% de La Sexta.
En la actualidad Imira está centrada en el público infantil y juvenil, ha sido reconocida con una serie de ayudas de la UE, 1,4 millones, para potenciar la industria propia. En 2009 facturó tres millones de euros, cifra que repetirá en 2010 aunque con un descenso de los márgenes debido a la caída de precios. Reitg está notando de todas maneras que “hay una recuperación en el mercado internacional desde mediados de año”. El 60% del negocio proviene de la distribución de productos mientras que la producción propia aporta el 40%. “Puede ser mucho mayor, vía venta de mercahndising, si consigues desarrollar una serie de éxito”. Con “Sandra” su producción de más éxito hasta la fecha, ha conseguido 14 licenciatarios.
En pocos años la empresa necesitará, según reconoce Reitg, más músculo financiero, en torno a cinco millones de euros, para continuar expandiéndose. Es por ello que contempla la entrada de un socio externo. Una productora complementaria es una buena posibilidad pero Reitg no descarta otro tipo de socios si provienen de ámbitos conexos, como pueden ser la fabricación de juguetes o el mundo editorial. De esa manera comenta Reitg, “podríamos generar muchas sinergias”.
Videojuegos
De momento, las expectativas más cercanas están puesta en una alianza con una empresa de videojuegos, Enne, de Salamanca, que ha desarrollado una tecnología de watch & play que combina televisión y videojuego pudiendo pasar de uno a otro indistintamente. Juntos van a desarrollar una serie de animación en 3D, ‘Escape Hockey’, con una versión convencional para la televisión, que será coproducida por TVE, y otra interactiva (a través del videojuego). Su coste, ocho millones de euros. Con esta innovadora tecnología el presidente de Enne, Jesús Adrián, pretende convertir su empresa en un referente mundial.