Todo tiempo pasado fue mejor
Cuphead llegó para quedarse y no es un juego para cualquiera. Es para la gente que mira hacia atrás con una lágrima en los ojos. Gente que realmente aprecia eso que ya no está entre nosotros. Si tienes más o menos treinta años, Cuphead te llevará a pasear a nuestra más tierna niñez.
Un verdadero nostálgico.
¿Te gustan los juguetes viejos? ¿la vieja música? ¿te encanta jugar a tu viejo Gameboy? ¿miras un Walkman y extrañas los cassettes? Si realmente amas todas esas cosas que ya han sido cambiadas en tamaño y fora (o han desaparecido), Cuphead es un juego para ti.
Los dibujos
La estética de Cuphead nos remonta a otra época. Los dibujos están basados en el arte de Max Fleischer (el genio creador de Betty Boop y Popeye), a eso, hay que sumarle la ambientación y la animación a 60 FPS hacen que Cuphead sea un verdadero placer.
La música
Con un soundtrack original (que se consigue por Steam de manera muy económica) de jazz de antaño (música icónica de principio de siglo) hacen que la atmósfera de Cuphead sea 100% nostálgica. Uno piensa ¿jazz en los videojuegos? la respuesta es SÍ. Jazz en los videojuegos. Y suena increíble.
Jugar de a dos
La posibilidad de jugar con otra persona de manera local, nos brinda una experiencia de juego muy diferente a jugar solito. Compartir tanta adrenalina y dificultad con otro ayuda a compartir la frustración (o enojarnos aún más).
La dificultad
Hay que sincerarnos: antes los videojuegos eran difíciles ¡tenían que durar! un cartucho de NES eran 40 minutos de juego. Había que tener una paciencia ENORME para poder terminarlos. Perder, volver a empezar, volver a perder, volver a empezar, se cortaba la luz, volver a empezar y así.
En Cuphead ningún nivel tiene checkpoints ¿moriste a medio metro del final del nivel? ¡a empezar de vuelta! Hay que pensar, armarse de paciencia, respirar hondo y volver a empezar constantemente. Eso sí: terminar cualquier nivel de Cuphead es sinónimo de festejo, de descorchar un champagne y sentirte util en esta vida.
En épocas donde la tolerancia a la frustración es muy pequeña, Cuphead nos pone a prueba recordando que lo fácil, en realidad, sale caro.
La historia detrás del juego
Cuphead iba a ser solo el combate con jefes ¡pero el hype que generó hizo que la gente pidiera más! pidiera un sidescroller hecho y derecho, completo, con todo lo que eso significa: niveles, modo cooperativo, power ups, etc.
Tardó varios años más de lo esperado, los hermanos Chad y Jared Moldenhauer, responsables de StudioMDHR (el estudio que llevó a cabo Cuphead) tuvieron que hipotecar sus casas y contratar a un equipo para poder desarrollar el juego que querían hacer. Y lo lograron con creces. Pasar de dos personas a más de veinte, reafirma y argumenta el compromiso ante esta obra de arte, hacia esta creación, la idea de dos hermanos nostálgicos.
Conclusión
La música de jazz sonando todo el tiempo, las animaciones y la calidad de los dibujos hacen de Cuphead una verdadera obra de arte que pasará a la inmortalidad. La invitación a la década del treinta y a nuestra niñez fue muy bien recibida y esperamos con gusto una secuela que nos siga llevando de paseo a nuestro pasado. Un pasado que está ahí, volviendo, de a poco, que nos recuerda la época de las golosinas, los juguetes, nuestros padres, las rodillas gastadas y las peleas con nuestros hermanos menores…
Sí… Eso también fue la vida. ES la vida.
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