Dijo en alguna ocasión el famoso filósofo y escritor Humberto Eco: “Nada es más nocivo para la creatividad que el furor de la inspiración”, y en la actualidad esto es una realidad, existe demasiada inspiración pero muy poca creatividad, esto se ve reflejado en que el mundo de la literatura de hoy está regida en su gran mayoría de sus nuevas publicaciones por historias y novelas que se dividen en dos, tres y en algunas ocasiones en más de cuatro libros con el mismo título, haciendo de la lectura una historia sin fin para sus lectores.
Estas tendencias se están incrementando en su mayoría en la literatura infantil y juvenil donde iniciaron esta tendencia la Saga de “Harry Potter” con sus siete libros, y la trilogía de “El señor de los anillos”; Es entendible que te preguntes ¿Y antes de Harry Potter no había sagas?, y yo te respondería si, existes varios libros divididos en partes o con continuaciones de la historia, los que diferencia a Harry Potter o el señor de los anillos es que gracias a las películas con el mismo título aumentaron las ventas y la popularidad de los libros.
A partir de este instante, la idea de los autores es crear historias pegajosas pero divididas en varios volúmenes de tal modo que también aumente sus ingresos en un solo título el caso de Juegos de Tronos, Crepúsculo o Juegos del hambre; aunque no es un secreto que al realizar estas sagas e incluso comercializarlas mediante películas o seriados basados en los libros aumenta notablemente el interés de los lectores, estas son estrategias netamente de mercadotecnia para vender ejemplares en vez de ganar lectores.
Si bien, las novelas que se presentan mediante sagas son historias interesantes y que mantienen al lector inmerso en una historia fantástica, también le están quitando la posibilidad de vivir nuevas aventuras y nuevas historias que pudieron haber realizado los diferentes autores a través de los libros, y repito, bien lo dijo Humberto Eco: “Nada es más nocivo para la creatividad que el furor de la inspiración”.