Las voces de Cuba por la diversidad, un descolorido monólogo.

Fundación Konrad Adenauer

Tomado de Huestes Utópicas

El 12 de diciembre, tuve la oportunidad de escuchar las presentaciones que, con bombo y platillo, anunció la Fundación Konrad Adenauer en su página “Las voces de Cuba por la diversidad”. El evento en sí mostró todo lo contrario, nada de diversidad y si un gran monólogo con muchas voces. Si pudiéramos resumir en palabras cada una de las presentaciones, quedaría algo así:

“Dictadura, Tiranía, los Castro, falta de libertades, persecución, nosotros somos el futuro, no hay elecciones libres, no hay democracia, el Sistema ha demostrado que no funciona, queremos la misma prosperidad de ustedes, todo está bajo control del ejercito, presos políticos, continúen apretando el cerco, hay corrupción y el gobierno se queda con todo, el Internet no existe, ayúdennos a salir de un mal gobierno…. y así por el estilo” A cada una de esas palabras (porque ni siquiera se puede hablar de ideas), denle un orden diferente y ya tendrán todas las presentaciones, y para darle un tono de más credibilidad contextualizelo con temas del momento “nueva constitución, decreto 349 y alguna anécdota personal”. Ah se me olvidaba, para estar a tono con la mentalidad alemana, hable de ecología y protección de la naturaleza. Ya está, si usted no pudo asistir, siga las instrucciones anteriores y le aseguro que no se perdió nada.

En lo metodológico, qué decir, si eso es lo que muestran como diversidad, inclusión y democracia, muy mal anda la cosa. Primer Panel, hora y cuarenta y cinco minutos. De ellos, hora y treinta minutos para los panelistas (dos rondas, en las que, con la guía del párrafo anterior, pueden reconstruirlas), solo tres preguntas posibles del público (dos de ellas de panelistas del segundo tiempo, o sea caras conocidas del moderador, y una posibilidad a suerte y verdad) Nos quedamos varios con deseos de intervenir. La participación de la persona alemana, que no estaba en la plantilla de los organizadores, fue muy interesante, en buen cubano podría resumirse así: ustedes saben que han venido a hablar de soga en casa del ahorcado. Ustedes están criticando una Constitución, que saldrá de un proceso de consulta popular, con participación incluso de los cubanos emigrados, en propuestas e ideas, en este país (Alemania) que no tiene mi siquiera una Constitución y lo que hoy se reconoce como Ley Fundamental es un documento entregado por las fuerzas de ocupación, sin ningún tipo de participación ciudadana. Me quedé y se quedaron sin palabras.

Del primer panel, realmente me interesaba escuchar al Sr. Amir Valle, tenía referencias de que era buen conferencista y no había tenido posibilidad de escucharle, en Cuba usamos una frase que dice: “zapatero a sus zapatos”, a lo mejor en literatura sea bueno, esperemos que algún día pueda escucharlo hablar de ese tema, metido a politólogo es más de lo mismo, nada nuevo: UMAP, Caso Padilla, nada sustancioso, más allá que la zanahoria de la que habló (que estoy seguro da para un buen caldo), cuando se refirió a los intelectuales cubanos de la isla, los que siempre han tenido (según él) miedo a expresarse, por no perder la zanahoria que les da el régimen. Para concluir usó un sofisma interesante, está cansado que se compare a Cuba con el resto del mundo, si tiene mejor salud, educación…. No sabrá el Sr. Valle de que los seres humanos, como a todo en la naturaleza le es innato comparar, pero peor, que toda su retórica en contra de la realidad cubana está preñada de comparaciones conscientes y subconscientes. Me quedé con las ganas de preguntarle, si cuando hablaba de intelectuales y zanahoria, por casualidad el no se estaba mirando en el espejo, porque la suya si es grande.

El Segundo Panel, si lo pudiera resumir en dos palabras, un desastre. Los panelistas, salvo el que presentó el power point, unos improvisados. Tengo que decir que Yoani Sánchez es vomitiva, pero sabe expresarse. Rosa María Payá, muy pobre. El Pastor de la comitiva, pésimo. Lo único que recuerdo de toda su perorata, fue la anécdota de la Claria que salió por el inodoro. Las imágenes que me vinieron son de esas películas de horror de 7ma categoría que ponen en Tele 5. Yo miraba al resto del grupo, la Payá le abría los ojos, en el banco Amir Valle agachaba la cabeza en su asiento. Pero miento, me recuerdo de otra anécdota, antes de salir de Cuba, lo llamó la Seguridad del Estado, y lo amenazó de muerte, a lo cuál el Pastor le ripostó, usted sabe que está violando mis derechos humanos, y esto también lo voy a denunciar cuando salga de Cuba. No sabe aún como lo dejaron salir. Lo de la amenaza de muerte, si es que hubo tal entrevista, estoy casi convencido que la cosa fue así: el oficial de la seguridad le pregunta, usted es cristiano, respuesta, sí. Entonces, conoce la leyenda de lo que hizo Judas con las monedas, respuesta, sí. Entonces, vaya usted y haga lo mismo.

En la parte que le tocaba al público, ya ni siquiera me animé a levantar la mano, me recordé aquello de mi infancia cuando jugábamos a las bolas, y le espetábamos al amigo más habilidoso: tu tienes el terreno medido. Sin dudas, esta vez el terreno si estaba medido. Sin embargo, hubo una participación interesante del Dr. Göll, especialista en temas de sostenibilidad, con información de Instituciones reconocidas internacionalmente en esos temas. En la que le rectificó a la Srta Payá los datos que dio en su presentación, y las razones que daba para la situación cubana. La respuesta que dio Rosa María Payá es que ella los había tomado de un informe de “People in Need” (Buscar en Wikipedia), esta organización, al igual que la coorganizadora del evento “Internacionale Gesellschaft fü Menschenrechte” (IGFM), son receptoras de los dineros que aportan la USAID y la NED de los USA en su campaña internacional contra Cuba.

Mis conclusiones de esta segunda parte? el envoltorio era la protección de la naturaleza, el fin real, apretar más las coyundas del Bloqueo sobre el pueblo cubano, sin mencionarlo en alguna de sus variantes. Para ello, atacar aquello que pueda estar dando beneficios económicos al país: El ron Habana Club, el turismo. Lo dejaron caer abierta y sutilmente: No consumir ron Habana Club, buscar opciones más ecológicas, no visitar la isla como turista, pues la insalubridad, las epidemias, el agua contaminada y los alimentos transgénicos están envenenando al pueblo cubano y son un peligro potencial para la vida del visitante. Cuando escuché hablar de los alimentos transgénicos a Rosa María Payá, pensé, que bueno, ya tenemos nuestra primera abanderada contra Monsanto (mientras no se entere que estos ponen billetes para su disiturismo). En resumidas, que “el régimen de los Castro” no tenga recursos para darle soluciones a los problemas ambientales, y así nosotros podremos seguir viajando en manada a denunciar las atrocidades y los desmanes contra la naturaleza y el pueblo cubano.

En fin, todo un bodrio con recursos, interesante, aunque uno se tenga que tomar antes un digestivo, porque muestra todo lo que no queremos que llegue a nuestra Patria, y como dijo un trovador nacido en mi pueblo: a ustedes, ya los vencimos en 1959.