Estos son unos cuantos ingredientes que de un tiempo a esta parte he decidido eliminar de mis cosméticos.Pero antes que nada…una revelación que desde hace unos meses ha mejorado en cantidad el aspecto de mi pelo, y que parece una perogrullada…pero a veces ni pensamos en lo que perjudica a nuestra cabellera:
Cómo lavarte el pelo, sin estropearlo en el intento. Pues sí señoras, esto que parece tan obvio, tan simple y tan cotidiano, modifica sustancialmente el aspecto de nuestro pelo.
Hasta hace poco, lavaba mi pelo con tendencia a graso, frotándolo como si me fuera la vida en ello…pensando que cuanto más frotara más grasa le sacaría…ignorante de mí!
Porque el pelo al ser células muertas , carece por definición propia de crear grasa él solo. De hecho la grasa solo la encontramos en la raíz, porque el cuero cabelludo (que no deja de ser un tipo de piel) crea el sebo necesario para mantenerse hidratado y evitar la caspa (escamación de la piel por sequedad) y picores molestos. De manera que al frotar mi pelo no solo lo estaba enredando como un ovillo (¡menudos problemas para peinarlo después!), sinó que además estaba abriendo las cutículas capilares, proliferando así las puntas abiertas…Finalmente vi la luz al final del túnel, y descubrí que sólonecesito masajear el cuero cabelludo, y desplazarla espuma del champú suavemente al resto del pelo. Este gesto fue suficiente para que mi pelo quedara limpio de raiz a puntas, sin enredos, y brillante.Una vez sabido esto os hago un “diagnóstico de mi pelo” al que os remitiré en todos los posts relacionados con productos capilares para que sepáis si mis características y necesidades capilares son acordes a las vuestras. Mi pelo es castaño claro de forma natural (no me tiño desde el año 2009 aproximadamente), es finoy lacio, y por tanto me cuesta mucho conseguir que adquiera volumen, aunque por suerte tengo bastante pelo. Suele ser tendente a graso en la raíz. En general tengo un pelo bastante sano, aunque procuro hacerme tratamientos de queratina después de cada estación. En cuanto al largo del pelo…es variable obviamente…ahora mismo mide unos 40cm, y tengo toda la intención de dejarlo crecer hasta el culete..jejejePues bien, según las características de mi pelo, hay una serie de componentes en los productos capilares que debo evitar en la medida de lo posible. Recomiendo que las que tengáis un pelo con características similares continuéis leyendo con atención, porque vuestra cabellera agradecerá que sigáis los consejos siguientes. Asimismo, creo que para cualquiera que desee tener una piel sedosa, hidratada, y sana debe ser consciente el efecto que crean en nuestra dermis algunos componentes de los productos que más utilizamos (lociones, mantecas, aceites, reafirmantes…):
Mi lista negra de ingredientes:
-Siliconas: Sobre el tema de las siliconas encontraréis mucha información, blogs, foros, etc. Por tanto os cuento cuatro cosas básicas y os remito a páginas fiables. Para empezar las siliconas no son buenas ni malas de por sí, todo dependerá del tipo de pelo.
La función de las siliconas es recubrir el folículo capilar con una capa impermeable que lo protege del encrespamiento, les da un aspecto brillante, retiene la humedad del propio cabello, y lo protege de agentes externos. Por contra, no deja respirar el pelo, les aporta peso, no permiten que el pelo reciba los nutrientes de mascarillas, aceites u otros tratamientos (por eso parece que nada mejore el estado de tu pelo, mientras tiras mucho dinero a la basura) no suelen ser solubles en agua por lo que se acumulan en nuestro pelo, creando el efecto build up, vulgarmente conocido como “este champú ya no me hace efecto”. Por tanto, si tu pelo es grueso, indomable y tendente al encrespado, probablemente te vayan bien los productos con siliconas y no tengas problema alguno. En cambio, si tu pelo es fino y con tendencia a graso, solo le hará que se engrase más rápidamente y se aplaste en la raíz.En el INCI o lista de ingredientes las podemos identificar con los sufijos–cone (ej: dimethicon), -conol (ej:dimethiconol), -xane (ej: siloxane), y obviamente aquellas que contengan la palabra silicate. ¡OJO! No confundir con la silica o sílice, que es un mineral esencial para nuestro organismo y para darle vitalidad a nuestro cabello, y aunque la silicona contiene silicio (=sílice) sus efectos son totalmente distintos. Existen algunas otras siliconas que podéis encontrar debidamente clasificadas en CosmeticsCop.comEn algunos foros he leído que también se consideran siliconas los ingredientes que comienzan con el prefijo PEG-. No obstante, eso no es completamente cierto. El término PEG es un acrónimo de Polyethylene Glycol, que en muchas ocasiones se juntan con ácidos o alcoholes grasos para crear una variedad de sustancias con diversas funciones (detergente, delimitadores para mantener mezclados los ingredientes, estabilizadores, y emolientes. Por tanto los “PEG-“ solo son siliconas cuando van acompañados en su formulación por alguna de las siliconas a las que he hecho referencia primeramente (ej: PEG-10 dimethicone).En realidad el polyethylene glycol es un líquido viscoso que ejerce funciones similares a la glicerina, y en como puede penetrar en la piel, también actúa como conductor para que otros ingredientes penetren en la piel.
Por el contrario, las siliconas al actuar como una película sobre el pelo o sobre la epidermis (en el caso de cremas) impiden que la piel y el pelo se oxigene y que penetren componenetes nutritivos y beneficiosos para nuestra piel y pelo.Por eso, dan una apariencia de pelo brillante o piel hidratada, pero…deja de usar ese champú/acondicionador/mascarilla/crema durante unos días y verás tus verdaderos piel y pelo: una piel seca, casi escamosa, y un pelo estropajoso. Eso significa que esas siliconas no le están aportando nada a tu pelo para que esté más sano…solo lo ha maquillado…e igual con tu piel. No es lo mismo limpiar la casa que esconder el polvo bajo la alfombra. En los dos casos la casa estará muy bonita, pero solo una de ellas será limpia e higiénica.
En este punto quisiera destacar la importancia de los conservantes en una época como la nuestra en que los productos no pueden ser llevados directamente de la fábrica a la tienda o al consumidor, sino que pasan por diversos procesos de composición y transporte, y por tanto es necesario que contengan conservantes que mantengan las propiedades del producto, y no se convierta, por el contrario, un nido de bacterias. Por tanto la conclusión es que los conservantes son necesarios. No obstante, las que nos gusta optar por productos con un mínimo de conservantes, o al menos mínimamente irritantes, debemos tener mucho cuidado cuando veamos un producto que alegue estar formulado “sin parabenos”, puesto que estos no son los únicos conservantes posibles. Así, por una parte existen conservantes“buenos”, como el benzoicacid, hoelen(hongo que crece en las raíces de los pinos, y posee propiedades antibacterianas), phenoxyethanol (uno de los menos irritantes), y sobircacid(conservante orgánico). Por el contrario, existen unos conservantes mucho más irritantes que los parabenos (aunque irónicamente usados prolíficamente en productos “sin parabenos”) como el Kathon (lo encontraremos bajo el nombre de methyl(chloro)isothiazoline), y derivadose del Formaldhehído. Para más información os remito a las paginas de CosmeticsCop.com, y CosmeticsInfo.org que tenéis a disposición en la columna superior izquierda de este blog.
Este dato es escondido por la mayoría de las industrias cosméticas, bien por desconocimiento al no investigar en profundidad las propiedades del folículo capilar a la hora de crear sus productos, o bien intencionadamente al ser abundante y económico. La sal que encontramos en los productos capilares suele ser utilizada como espesante a fin de que el producto no sea tan líquido como el agua y sea manejable por el consumidor. Además genera bastante espuma lo que da la sensación de que con poco producto puedes lavarte toda la cabeza. Los pioneros en formular champús sin sal son las empresas brasileñasexpertas en tratamientos de queratina para el pelo. Aunque estos productos son algo más caros, también podemos encontrar en tiendas más comunes champús/acondicionadores/mascarillas sin sal; especialmente en las líneas de cuidado de bebés. Cabe señalar que, la sal que arrastra la queratina la encontraremos en la lista de ingredientes de un producto bajo el nombre de Sodium Clhoride. Existen otras sales que empiezan por el término sodium, igual que otros ingredientes que contienen el término clhoride. Sin embargo estos no arrastran la queratina, sólo lo hace el cloruro de sodio. No el sodio sólo, ni el cloruro sólo. Como sabéis existen componentes que individualmente son inofensivos pero que juntos pueden crear una reacción irritante o tóxica…Este caso es lo mismo.
Los sulfatos no es que sean malos o perjudiciales para la salud…es que son altamente agresivos con el pelo. Lavarse el pelo con un champú que contenga sulfatos es como fregar todos los días tus platos con KH-7, o amoniaco. Puede que de vez en cuando una sartén lo necesite, pero no todos los días, ni todos los platos…o te quedarías sin vajilla en 4 días. Pues con el pelo sucede algo similar: no siempre nos lo lavamos porque esté sucio, sino por higiene o porque ha acumulado un poco de grasa y polución, la cual se elimina perfectamente con un champú sin sulfatos. En cambio, cuando nos hayamos echado un tratamiento aceiteen el pelo, o usado lacas o espumas, o hayamos ido a la playa y se nos haya ensuciado con arena; sí será necesario un champú con sulfatos.
Conclusión: es recomendable usar como hábito un champú neutro sin sulfatos que no té dañe el pelo, y tener además un champúcon sulfatos como champú de limpieza profunda para usar una vez a la semana como mucho, o para los casos que he señalado.Los sulfatos más comunes que podemos encontrar son el Sodium/Amonium Laureth Sulfate (que proviene del coco, y que es el menos agresivo), y el Sodium Lauryl Sulfate (que aunque se parezca al anterior, nada tiene que ver, y es bastante más irritante)
Como para muchos cosméticos han surgido en torno a estos ingredientes estudios sobre su potencialidad de causar cáncer…igualmente, existen otros tantos en contrario. Independientemente de cuestiones médicas, en las que no me adentraré por pura ignorancia, puedo contaros que se trata de un ingrediente que retiene la humedad de la piel formando una película que impide que esta se evapore, pero también que entren otros nutrientes. Es decir, que en sí, es un producto que no aporta nada a la piel, es un ingrediente oclusivo que tapona los poros (creando acné y sofocando la piel), y da apariencia de estar hidratada. Otro ejemplo de la diferencia entre limpiar la casa y esconder el polvo bajo la alfombra…Cabe señalar que los estudios de los que os hablaba anteriormente sobre la posibilidad de causar cancer…estos estudios vienen referidos únicamente al contacto de estas sustancias con la piel. Así, si quisieramos tener en cuenta este dato, o simplemente partiendo de la base de que se trata de un componente oclusivo, parece obvio que no es recomendable para ningún producto que deba tocar la piel o el cuero cabelludo. Por otro lado, debemos diferenciar entre la piel y el pelo, pues mientras que la primera es un órgano formado por células vivas, el segundo son células muertas…por lo que el cuidado de una y otra deben variar por sus propias características. Así, por ejemplo, si bien no es recomendable una crema corporal hidratante con parafina, no parece presentar la misma reticencia sobre un acondicionaros que la contenga (ya que sólo se aplica de medios a puntas).En cuanto a la credibilidad de los estudios que afirman la insalubridad de estos derivados del petroleo, creo que si realmente supusiera un peligro inmedianto para la salud, las autoridades sanitarias lo habrían prohibido…pero al mismo tiempo pienso que, igual que muchos pensamos (igual que tantos otros piensan lo contrario) que el consumo de tabaco provoca cáncer, no lo han prohibido por no demostrarse una relación de causa efecto directa y exclusiva (como si las enfermedades solo pudieran ser causadas por una razón…) De manera que vemos a diario como las decisiones de las autoridades sanitarias van muy por detrás de lo que deberían…Además, aunque los ingredientes citados no están prohibidos en sí mismos, la Unión Europea en la Directiva Europea 76/768 sobre cosméticos prohíbela total utilización en cosmética de la mayoría de variantes de los mismos. Eso me hace ser algo más esceptica, y por tanto como opción personal eligo: NO a los derivados del petroleo.
Espero que os haya sido útil la información.¿Qué pensáis al respecto? ¿Habéis mirado los ingredientes que tienen la mayoría de los cosméticos que utilizáis?
publicado el 27 mayo a las 17:42
Estupendo post y bien explicado. Muchas gracias!