Una no está preparada para que le ocurran ciertas cosas. Es más, creo que el ser humano realmente, no está preparado para nada. Ni para el amor cuando llega (porque te vuelves gilipollas y pierdes la razón) ni para el desamor cuando se acaba (porque te vuelves gilipollas y pierdes la razón....) de la misma manera.
Son imprevistos a los que te enfrentas sin entrenamiento... ¡Para la vida no hay escuela! Y de repente...Te das cuenta.
Hay cosas que se aprenden en directo, sin previo aviso y sin examen de Septiembre para una posible recuperación. Hay quienes se pasan media vida intentando "recuperarse" de esa lección que le ha puesto la vida... Otras personas, cambian de escuela y se acabó.
Los padres (al menos en mi caso) siempre te van a tratar como si no hubieras crecido, siempre se van a preocupar por ti y por tu situación y siempre, por experiencias de la vida... Suelen tener razón.
Ellos me aconsejaron que no confiase en nadie (o casi nadie) que los que hoy son amigos, mañana ni se acodarán de mí, que muchos de los que te preguntan "¿Qué tal estás?" Lo hacen con la boca pequeña y realmente les da lo mismo.
A veces lo que quieren es disfrutar de tu desgracia (hay gente que se siente mejor si a otros les va aún peor) cotillear y desde luego no se preocupan por ti. Porque los que sí se preocupan no necesitan que los llames para contarles cómo estás, los que te quieren te llaman, porque saben que muchas veces una, por propia iniciativa no lo hará.
A nadie o a muy pocos le importa tu vida o tus problemas cuando entran por la puerta de su casa. Es una gran verdad....
Personas que cuando estás en tu peor momento son los que están ahí, son los que aún sabiendo que vas a llorar en su hombro 3 horas...¡Ponen sus hombros para que llores...hasta a las horas más intempestivas!!
Personas que te ofrecen todo lo que tienen y todo lo que son.... Te ofrecen su cariño, su atención, su casa, su mesa (y hasta la ducha si te quedas sin agua...) y siempre te reciben con un abrazo y una sonrisa... Que te lo perdonan todo: tu incontinencia verbal (cuando tienes que soltarle el rollo sí o sí) o tus silencios cuando no tienes nada que decir... Y no te juzgan...
Tengo amigos de esos que si a la Rubita le hace ilusión asistir a un recital de poesía o una muestra de encaje de bolillos...¡La suben a su coche y se la llevan! Pero la Rubita que no sufra...
Que la Rubita tiene ganas de concierto (aunque a mis amigas no les haga ninguna gracia...pobrecitas ellas!!) Pues compran entradas VIP y reservan mesa para que la Rubita pueda contemplar el concierto en la primera fila.
Amigas que cuando están alegres te llaman y te invitan a compartir su alegría, pero que de la misma manera cuando una está triste y sin ganas de nada, la llaman también para saber qué es lo que pasa y sacarte una sonrisa.
En los malos momentos es cuando aprendes la lección y es cuando puedes discernir a la gente y a las personas. Gente que te quería cuando eras feliz y tu vida era divina... Ahora bien, ¿Qué estás triste y necesitas compañía? Uhhh, que bajón, no me apetece nada escuchar las historias de "fulanita" (eso pasa y mucho...¿o no?)
Pero aunque las matemáticas no son mi fuerte, me sobran los dedos de las manos para contar el número de veces que me ha llamado "fulanito" o "menganita".
Sé sumar perfectamente el número de veces que me han invitado a café o a comer o lo que surja... Sé que cuento con personas a mi lado que me seguirán llamando, que me seguirán escribiendo y seguiré formando parte de sus planes y de sus vidas.... A todos ellos gracias.
Gracias a los "padres del cole", que siempre envían whastapp con las últimas reuniones y noticias, excursiones, charlas, reuniones...¡Gracias a ellos estoy al día! Es genial que te tengan presente aun cuando por motivos laborales estás ausente.También están esos amigos, lejos...que a cientos de kilómetros tienen 5 minutos de su tiempo para ti, te leen, te contestan y te hacen sonreír. Amigos que te anima, te apoyan, no te juzgan, no te critican y son capaces de estar ahí para tí cuando lo fácil seria salir corriendo... A todos vosotros gracias!