Revista Diario

Lecciones de civismo

Por Minae @MinaeDemina

Lecciones de civismoHoy os voy a hablar de un tema muy escatológico. Dicen que los catalanes somos los Number One en este tema, tan solo hace falta fijarse en que ponemos hasta un caganer en el belén. Pero no va por ahí el tema, quiero hablaros de defecaciones o heces, lo que viene a ser una caca, pero en este caso de las de los perros.

¿Quién no se ha acordado del dueño de algún perro y de toda su familia tras pisar una mierda en la calle?
Por mucho que digan que da buena suerte o te deseen mucha mierda ante un evento importante para ti, es una putada un fastidio. Pues precisamente hoy nos hemos dado un gustazo mi hermana y yo, gracias a uno de esos dueños tan cívicos, que se quejan cuando pisan una, pero luego van paseando sus perros tan tranquilamente y tienen los huevos la santa decencia de dejar el regalito tirado en el suelo.

En mi pueblo tenemos un precioso parque, que podréis ver en la imagen, donde los niños y no tan niños pasan las tardes, como viene siendo normal. Hay una zona de césped que no suele ser pisada, pero que no suela no quiere decir que nunca nadie vaya a pasar por ahí, además añadiendo que si un perro hace sus necesidades mayores resultan más difíciles de ver. Pues bueno, esta tarde paseando con Beth, el Labrador Retriever de mi hermana, hemos visto como un chico, aproximadamente de nuestra edad, venía paseando sus dos perros hacia nosotras. Como os podéis ya imaginar, uno de ellos ha plantado el pino y el chico ha seguido tan tranquilo, sin molestarse siquiera en controlar si alguien le había visto.

Nosotras siempre solemos llevar un par de bolsas en el bolso, como las madres que siempre llevan algún chupete, y mi hermana no ha podido resistirse y le ha preguntado amablemente, cuando ha llegado a nuestra altura, si quería una bolsa. Primero nos ha contestado que no, pero ella le ha insistido remarcándole que era para recoger la caca.

Os lo prometo, hubiera dado lo que fuera por poder haber colgado junto este post una foto de la cara que se le ha quedado al tipo. Por supuesto en ese momento ha aceptado la bolsa que le hemos ofrecido y se ha dado media vuelta para recoger lo que se había dejado. No os podéis imaginar lo que nos hemos tenido que aguantar para no reírnos en su cara y esperar hasta llegar a la esquina para descojonarnos.

Así que ya sabéis, si alguna vez os ocurre algo similar y tenéis la oportunidad de ofrecer una bolsa, no os cortéis, vale la pena darse el gustazo y enseñar a la gente un poco de civismo. Me parece muy injusto que se multe a alguien por jugar en el parque con su perro cuando está prácticamente vacío y por lo tanto no molesta a nadie y en cambio las minas perrunas las puedan ir sembrando como les plazca.

Lo dicho… ¡Mucha mierda a todos!

:D



Volver a la Portada de Logo Paperblog

Dossier Paperblog