¡Buenas a todos!
Me he pasado toda esta semana redactando documentos en inglés, y después de tantas horas se me mezclan los idiomas. Por ejemplo, ellos tienen una expresión que es “be craving for (something)”, que aunque se puede traducir como “desear vehementemente” en realidad tiene una implicación mayor. Es como si todas las células de tu cuerpo chillaran y suplicaran desesperadas para que les dieras algo. Es un concepto potente (tanto fonéticamente como en significado) que va más allá del siempre hecho de querer algo, y que resulta difícil de traducir.
Pues vale, yo hoy (y desde hace un par de días) estaba “craving” por el fin de semana. Bueno, yo y mucho más, eso seguro. Porque lo ansiamos aún más cuando sabemos que será un puente, que aunque no es muy largo, significa un día más para hacer planes y descansar…
¡Y para leer! Ahora que parece que en la última semana he remontado un poco el ritmo, no veo el momento de tener tiempo para mí y acurrucarme en el sofá con una manta y un par de libros. Desde el viernes pasado he conseguido terminar Un ciego con una pistola y también La mirada del observador, lo cual no está nada mal porque ya es la mitad de lo que he leí el mes pasado.
Así que continuando con la idea de terminar la colección de novela negra del año pasado de ElPaís (de la que solo me quedan 3, contando este) mepongo con La hija del tiempo. Me ha dado un poco de rabia que sea el quinto de una serie, sobre todo porque el protagonista está en el hospital ya desde el capítulo 1 y no sé nada de él. Espero que no suponga un impedimento para que lo disfrute como ya me pasó precisamente la semana pasada con Un ciego con una pistola. Veremos…
Y Némesis. Realmente no es que sea una futura lectura (para cuando termine el otro) sino que en realidad ya lo tengo empezado y voy mucho más allá de la mitad. Y es que tras haber terminado Petirrojo, me di cuenta de que quería más pero que si me dejaba llevar descuidaría otras lecturas para pasarme un mes entero con Harry Hole. Así que le mantengo a escondidas y no le dejo venirse a la cama conmigo… aunque nadie dijo nada del sofá.
Puede que los tres días me den para algo más, pero no quiero hacer grandes planes que se me venga abajo fácilmente. Voy a dejar que sea lo que tenga que ser, aunque por supuesto tengo otros preparados sobre la mesita… pero eso será más adelante.Ahora contadme vosotros… ¿Qué vais a leer este puente?