Después de que los Reyes se hayan pasado por vuestras casas (¿qué os han traído?) y de pasar unos días en Granada (y la Alhambra) volvemos a las andadas en Gecko Books.
Hoy os traigo la lista que vais a encontrar en las pestañas superiores del blog de las lecturas del año 2014. No va a haber ningún desafío importante en cuanto a cifras este año, aunque en Goodreads me he marcado la lectura de los 120 del año pasado. Espero sobrepasar dicho número como viene siendo habitual.
De todas formas, pretendo leer más de lo siguiente:
- Libros en inglés. Más de 20, para ser más exactos.
- Autores de estos que todo el mundo conoce, sean clásicos o más contemporáneos, y necesarios para que me sienta una persona leída.
- Ciencia ficción (¡a tope con los Hugo!), romántica adulta (un género que me apetece mucho probar) y más fantasía de esa que me gusta tanto.
- Segundas y terceras partes de sagas que tengo abandonadas. Sobre todo de las juveniles ya publicadas completamente.
¿Qué os parece? No es algo excesivamente complicado, o eso parece. En cuanto al blog no tengo ningún propósito, seguir con él como ahora, seguir reseñando sin complicarme demasiado la existencia... sin metas. Parece mentira, pero ahora que he llegado a los 1000 seguidores (hace mucho) es como que me siento liberada. No debería ser así, lo sé, pero lo es. Cosas que pasan. Dicho esto, pasamos a la lista en sí de libros, abajo del todo de la entrada tendréis una lista de los retos a los que me he apuntado este año.
Enero:1. Los nombres muertos, de Jesús Cañadas2. POV, de Chris Bronahan3. ...
- Son frecuentes las expresiones de apertura, como los saludos (¡Hola!, ¿Cómo estás?, ¡Buenos días, etc.), y de cierre (¡Adiós!, ¡Hasta pronto!, ¡Hasta mañana!, etc.), expresiones de cortesía a las que el interlocutor suele responder con otras similares. También son habituales las llamadas de atención al oyente (Escúchame, Atiende, etc.).
- Se utiliza un vocabulario sencillo, directo, expresivo, favorecido por el contexto y la situación.
- Las frases son breves, con tendencia a lo coloquial y espontáneo; en ellas cobra mucha importancia la entonación.
- El estilo, generalmente, es poco cuidado.
- Saber hablar y escuchar, respetando el turno de palabra.
- No intentar acaparar la atención convirtiendo el diálogo en un monólogo.
- Evitar las divagaciones, ordenando nuestras ideas antes de intervenir.
- Dar el tono adecuado a nuestras intervenciones.
- Ser respetuosos con los demás, aunque discrepemos con lo que manifiesten.
