Hoy os traigo una entrada algo diferente a lo que yo estoy acostumbrada a escribir y vosotros a leer, si seguís nuestro blog. Esta vez, vengo a hablar de los clásicos. Sí, esos libros a los que a muchos de nosotros nos da un gran apuro leer cada vez que nos los mencionan.
He de decir que no soy una experta en este tema y que tampoco me siento muy cómoda hablando de ello, por lo que mi opinión y mis observaciones son pura y meramente subjetivas. Voy a mencionar algunos clásicos que he tenido que leer como lectura obligatoria en mis años de instituto y algunos a los que me gustaría darle una oportunidad.
¡Empecemos! (Los libros que voy a mencionar no llevan estrictamente un orden)
Si no recuerdo mal (puede que me equivoque) el primer clásico que leí, en este caso de la literatura española, fue El lazarillo de Tormes, del cual desconocemos la identidad del autor. Se trata de una novela epistolar de corte autobiográfico, donde el protagonista envía cartas escritas por él mismo a un tal "vuestra merced" contándole su vida y todos los hechos que le han ocurrido desde que era pequeño hasta la época en la que escribe dichas cartas.
Me lo mandaron como lectura obligatoria en 3º de ESO, como se suele hacer. Seamos sinceros, si a un niño/a de esa edad le dices que tiene que leerse un clásico escrito en un español que no es el actual (aunque sea una adaptación) y que encima tiene que hacer un examen, pues alegría es lo que menos le va a dar cuando se entere. En mi caso, yo iba con las expectativas muy bajas ya que no me hacía ninguna ilusión leer ese libro. Sin embargo, al final la historia me enganchó. Sí, sí, como lo oís. Llegó a gustarme conocer la vida del lazarillo aunque en algunas partes llegué a empatizar tanto con el personaje que yo también lo pasaba mal debido a la forma tan realista con la que describía algunos episodios de su vida. En cierto modo me alegro de que me mandaran leerlo ya que en cursos posteriores estudié la obra y me resultó algo más fácil ya que leí el libro.
El libro por excelencia que leí también en este curso fue una adaptación de la famosa tragedia de Shakespeare, Romeo y Julieta. Me gustó muchísimo y la disfruté de principio a fin. Sentía la presión de que tenía que hacer un examen de esta obra, sí, pero eso no me impidió disfrutarla. Si tenéis la oportunidad de leerla alguna vez os la recomiendo totalmente. ¿Qué más se puede decir? ¡Es Shakespeare! ¡Es Romeo y Julieta! (Por cierto, tenéis que ver la película Shakespeare In Love, ¡es una orden! Trailer Shakespeare in Love)
Al año siguiente, en 4º de ESO, tuve que enfrentarme a otros dos clásicos. Por una parte, tuve que leer una selección de rimas y leyendas del poeta romántico Gustavo Adolfo Bécquer. No voy a andarme con rodeos, porque me encantaron. Sí, de verdad, de principio a fin, sobre todo las leyendas (El monte de las ánimas, El Miserere, Maese Pérez el organista y Rayo de luna) El Romanticismo es una época que me gusta bastante en lo que se refiere a literatura y poesía, por lo que fue una lectura bastante buena.
El segundo libro que tuve que leer fue Bodas de sangre, de Federico García Lorca. Este libro ni me gustó ni me disgustó, simplemente lo tomé como una lectura obligatoria más (Ojo, mi criterio y mi opinión no influyen en la calidad de esta obra) Estuvo bien y me entretuvo, pero nada del otro mundo. Supongo que no era el clásico "indicado" para mí. Aunque he de decir que me encanta el juego de símbolos de Lorca, me parece un rasgo muy muy original.
Al pasar a Bachillerato los libros que me mandaban ya tenían un grado de complejidad. En 1º de Bachiller tuve que leer La Celestina, de Fernando de Rojas. Cada vez que me nombran este clásico siempre me río, y es que es un libro con el que me pasé casi la mayor parte del tiempo riéndome. No sé por qué a la gente no le gusta: los ataques hormonales de Melibea y Calisto son un puntazo, la picardía de Celestina y su forma de manejar a la gente llama bastante la atención, y la "estupidez" en algunos casos de Pármeno y Sempronio es bastante graciosa. Sí es cierto que las descripciones se me hicieron muy pesadas porque podían llegar a tirarse como 4 o 5 páginas describiendo un paisaje o recitando un monólogo pero, en general, fue una lectura muy entretenida.
En este curso tuve la oportunidad de leer la GRAN OBRA de la Literatura Española. Sí, hablo de Don Quijote de la Mancha, de Miguel de Cervantes. Tenía miedo de empezarla y no poder con ella porque está dividida en dos partes y escrita en un castellano antiguo. Se me hizo bastante pesado empezar y cogerle el ritmo a la historia pero, una vez acabada, entendí por qué está considerada de la manera en la que lo está y por qué es tan importante. No creo que disponga de la capacidad necesaria para explicar ésto, simplemente pienso que es un libro que todo el mundo, si tiene la oportunidad, debería leer, sea la adaptación que sea. Además, se trata de la primera novela que hace burla a las novelas de caballerías tan famosas en aquellos tiempos (lo que le dio bastante fama). No creo que pueda decir mucho más de lo que ya se sabe, pero sí alguna vez en bachillerato os hacen leerlo, dadle una oportunidad. De verdad.
La tercera y última obra que leí en ese año fue El perro del hortelano, de Lope de Vega. Es una de sus comedias más famosas y básicamente se resume en la expresión: "El perro del hortelano no come ni deja de comer"asociada a la actitud de la protagonista Diana, la cual se niega a amar a Teodoro y por eso, no puede dejar de amarle (más o menos). Por lo que habréis deducido, el principal tema es el amor.Fue una lectura bastante rápida y además cuenta de una adaptación cinematográfica que está bastante bien porque es el libro "calcado", literalmente, y eso me ayudó bastante a comprender mejor este historia.
En 2º de Bachiller, el último año de instituto, he tenido la suerte de poder dar una asignatura que se ha convertido en mi favorita hasta la fecha: Literatura Universal. Tuve la suerte de tener una profesora estupenda a la que se le nota que le gusta su trabajo, que sabe transmitir su amor por la lectura, por el cine, por el arte, etc, a la que le mando un abrazo si me está leyendo ahora mismo. Me hizo ver la literatura de una forma totalmente diferente y gracias a ella y a esta asignatura pude leer los siguientes libros que voy a mencionar:
Por una parte tenemos la más famosa tragedia de Shakespeare: Hamlet. Se considera la mejor de todas por el tema de la lucha entre la cordura y la locura del personaje principal. Esta obra trata principalmente el tema de la venganza. El personaje principal de esta obra ha quedado para la historia como símbolo de duda. Shakespeare indaga mucho en los sentimientos de los personajes y se caracteriza por la perfección de los monólogos de sus protagonistas destacando, en este caso, los del príncipe Hamlet, que mantiene una lucha interna sobre qué decisión es la correcta para resolver el problema que envuelve a él y a su familia. Volviendo al tema de los monólogos, uno de los más famosos está sacado de esta obra y ha sido interpretado de la mano de grandes actores de teatro. Según decía mi profesora "Para ser un actor de verdad en Inglaterra tienes que saber recitar Shakespare, en concreto, Hamlet" El título original es "To Be or Not To Be", que en español se traduce como "Ser o no ser". Por aquí os dejo un enlace a este monólogo recitado por David Tennant https://www.youtube.com/watch?v=RzuEKkPVeBQ Fue una lectura que disfruté mucho, la verdad. No he podido leer mucho más de Shakespeare en el instituto, pero sé que en la carrera lo haré y me muero de ganas.
El siguiente libro del que os vengo a hablar es Frankenstein, de Mary W. Shelley. Cuando me enteré de que íbamos a leerlo me entró muchísima curiosidad. Era un libro que siempre me había llamado la atención y que no creía que podría llegar a leerlo en el instituto. Gracias a ello me enteré de que Frankenstein en realidad es el profesor y no la criatura que éste crea, como la mayoría de la gente piensa o pensábamos.Me encantó. Quedé totalmente alucinada con la forma de escribir de la autora, con la historia, con los personajes, con sus emociones, con sus miedos, con las descripciones... Cada vez que pasaba una página quería leer otra y otra y otra y otra y otra más. Tardé un tiempo en terminarlo, pero era porque de verdad lo estaba disfrutando. Creo que es el clásico que más me ha enganchado y que más me ha gustado. No he leído muchos, aún me quedan miles por leer, pero si me preguntaran ahora mismo qué clásico es mi favorito sin duda diría que es Frankenstein. Es una obra del Romanticismo, no sé qué más pedir. Sin duda, es una de lecturas que más he disfrutado este año.
Si querías subir nota podías leer un clásico por tu cuenta siempre que tuviera relación con la época que estábamos estudiando, y yo elegí Cumbres Borrascosas, de Emily Brontë. Me gustó muchísimo. Al principio no pillaba bien la historia, pero una vez que pasas la parte introductoria comienza la acción y te engancha con gran facilidad. Me encanta el toque negro y oscuro de este novela romántica y creo que no podría haber sido otro ambiente el que recreara mejor la historia de Heathcliff y Catherine. Creo que se ha convertido en uno de mis favoritos aunque, repito, he leído muy pocos. Pero es una historia que te engancha y que en algunos momentos hace que parezca que te falta el aire. Tiene unos giros muy buenos y muchos flash-backs, cosa que me encanta ya que así puedes entender mejor por qué los personajes son de la forma que son, por qué viven de la forma en la que viven, por qué algunas relaciones existen y otras ya no... Lo recomiendo a todo el mundo y espero leer pronto algo más de las hermanas Brontë.
El penúltimo clásico que tuve que leer este último año fue La Metamorfosis, de Franz Kafka. Mi relación con este libro es algo complicada. Había momentos en los que me parecía de lo más interesante la metáfora, y digo metáfora porque una vez que lees el libro descubres que con esa transformación del personaje principal en un insecto gigante, lo que el autor quiere transmitir es el sentimiento de inutilidad, de estrés, de cambios, de no saber qué hacer ni qué camino escoger cuando tu vida da un vuelvo de 180º. De esta forma el protagonista una mañana se despierta convertido en un insecto que se va consumiendo poco a poco. Tuve bastantes idas y venidas, a veces lo cogía con ganas y otras con cero. No me llegó a gustar tanto como los que he dicho anteriormente, pero entiendo el gran valor que tiene esta historia y por qué es una de las más reconocidas de la Literatura Universal.
Y para finalizar, el último clásico que leí fue La casa de muñecas, de Ibsen. El argumento de esta obra está relacionado con Madame Bobary, de Flaubert y con Anna Karenina, de Tolsói. Esta obra me pareció buena en la forma que tiene de expresar la "rebelión" de la mujer ante su marido, cómo quiere deshacerse de las cadenas de su casa, cómo quiere aprender a vivir a su manera, cómo descubre quién verdaderamente es y qué es lo que quiere en su vida... Debido a la época en la que se escribió esta obra, una historia que tuviera como protagonista a una mujer "rebelde" que se aleja de su marido y sus hijos causó impacto en la sociedad, que veía a la mujer tan sólo como una ama de casa. Ese aspecto me gustó bastante, pero la historia se me hizo muy pesada. Me daba mucha pereza ponerme con ella y terminarla, porque me aburría la trama. Lo único que me pareció interesante fue el final, donde se ve a la protagonista rebelarse ante su vida. Además, no soportaba al personaje del marido, demasiado machista en mi opinión.
¡Y hasta aquí llega esta pequeña reflexión! Siento que se haya hecho tan larga, pero para hablar de ésto pienso que debe hacerse con un mínimo de conocimientos y he intentado aplicar los míos cada vez que he nombrado cada libro. Como ya he dicho antes, espero leer muchos más clásicos de ahora en adelante porque supongo que conforme vas creciendo los vas disfrutando más. Para no ir más lejos, en mi casa tengo un ejemplar de El retrato de Dorian Gray, de Oscar Wilde, y no descarto que sea una de mis próximas lecturas como muchos más que espero encontrarme a lo largo de mi vida.
¡Muchísimas gracias por leer y que tengáis unas felices lecturas!
Ah, y disfrutad de lo que queda de verano, ¡hasta la próxima!
Pilar.