Nació con la marca de los elegidos, la cicatriz del guerrero. Con trece años, Alejandro ya había sido instruido en las artes y las estrategias militares. Ahora, con dieciséis, bajo el título de príncipe regente, debe derrotar a su primer gran enemigo. Pero la espada no sirve allá donde se extiende el reino de la magia y la brujería.
Alejandro, de dieciséis años de edad, está a punto de descubrir que su destino es conquistar el mundo conocido, al mismo tiempo que se siente profundamente fascinado por una recién llegada.
Katerina debe navegar por los oscuros secretos de la vida de la corte mientras mantiene oculta su verdadera misión: matar a la reina. Y no es consciente de que ha encontrado su primer amor.
Jacob empleará todas sus fuerzas en conseguir a Katerina, aunque para ella tenga que enfrentarse a Hefestión, el protegido del príncipe.
Y al otro lado del mar, Zofia, una princesa persa y prometida contra su voluntad a Alejandro, quiere cambiar su destino mediante la búsqueda de los famosos y letales Devoradores de Espíritus.
Legado real es un libro al que le tenía unas ganas impresionantes. Tal vez por ello llevaba unas expectativas demasiado altas y que podría haberlas cumplido, pero no lo ha logrado del todo. Sin embargo cierro el libro con una buena sensación.
En este libro contamos con muchos personajes y según que capítulos vemos las cosas desde un personaje u otro. Estos tipos de libros siempre llevan el problema de que hay unos personajes que gustan más que otros y siempre unos capítulos se harán más pesados. Aquí debo decir que no me ha disgustado tanto el cambio de escenarios de una mente a otra, sin embargo sí que he notado que se centra mucho en unos dejando muy de lado a otros.Respecto a los personajes... He tenido un poco de cabreo con ellos, me esperaba más de ellos. Cin es una mimada arrogante que sí, a veces me ha hecho gracia, pero es una bruja. No obstante creo que ha sido la que más me ha sorprendido hacia el final. Tiene un toque diferente y he de reconocer que me ha gustado. Hef es idiota. Pintaba bien como fiel a Alejandro pero después de ver que duda tan fácilmente me apetecía tirarlo por la ventana. Que al final no me ha caído tan mal como al principio pero tampoco me convence.Alejandro es uno de los principales protagonistas y menos mal que me ha gustado desde el inicio. No es que me haya encantado pero al menos no me provocaba un sentimiento de rechazo. Kat si que me lo ha provocado alguna que otra vez, tal vez porque sus partes a veces eran aburridas y decía que iba a matar a la reina pero yo seguía esperando. Además de que la chica no iba con ningún plan elaborado, simplemente un "voy a matar a la reina, lo que pase luego da igual" y eso como que denota falta de inteligencia y meh. Es una mezcla de me gusta pero un poco de rechazo escondido. Jacob es un personaje que está ahí y casi que nada más y Zo me gustaba, la que más, su parte ha sido la que más ganas tenía de ver pero aparece en muy pocos capítulos y me ha dejado con muchas ganas.Los personajes han sido bastante diferentes, no salgo del todo contenta pero gracias a algunos tampoco salgo muy asqueada. Me ha hecho falta algún personaje más inteligente y astuto. Todos me han parecido muy niños, me hacía falta un poco de equilibrio y ese es el fallo que le encuentro a los personajes y el por qué no me ha gustado tanto.Por otra parte la historia que se escondía detrás me ha fascinado pero ha habido momentos que se me han hecho un poco cuesta arriba, demasiada poca acción, me ha faltado dinamismo. Así como me ha resultado predecible en numerosas ocasiones, por ejemplo toda la investigación que lleva Kat, que tal vez no lo supiera exactamente pero desde el principio se deja atisbar lo que es y se pierde el elemento sorpresa que en este tipo de libro es lo que busco.
El final creo que ha sido lo que más me ha gustado, se concentra más todo y ha sido más dinámico, por lo que lo he podido disfrutar más. La trama del libro ha sido entretenida e incluso interesante, con una narración que no es lenta pero me ha dado sensación de relleno.En conclusión, Legado real cuenta con una trama que me gusta pero que considero que podría ser mejor aprovechada si no hubiera sido lenta en ocasiones y con unos personajes que llevaran a situaciones impredecibles. Está bien, me encanta el tiempo en el que está narrado, ese toque de magia que se deja ver en ocasiones pero he echado en falta algo más.