Leónidas fue un rey famoso en la antigüedad por crear el primer camino de peaje en el mundo.
Su nacimiento es bastante incierto. Presuponemos que nació de Esparto, si hubiese nacido de otra cosa, hubiese sido descartado.
Tuvo que pasar la gran prueba espartana. Todos los espartanos debían de pasarla, y él, como heredero de la carpintería, también.
La prueba consistía en dejarle solo en su cuarto toda la noche, solo con una luz. Y, para dar más miedo, no le daban ninguna flor, ni ningún libro para leer. Leónidas sobrevivió, y se convirtió en un espartano de verdad.
Le ascendieron a rey por la gracia y arte de Dios y encontró la muerte (ya podía haber buscado otra cosa ) durante la Segunda Guerra Médica, en la heroica batalla de las Termópilas bloqueando el avance del ejército persa de Jerjes. Una batalla por introducir medicamentos en Grecia que acabó como el rosario de la Aurora.
Solo llevó 300 soldados, ya que sus espías fueron bastante imprecisos con el número de enemigos. Le dijeron que eran muchos pero muy pequeños. Resulta que en realidad los habían visto de lejos.
Los 300 constituían la guardia real, a razón de un centenar por cada una de las tres tribus en que estaban divididos los espartanos. Este cuerpo estaba formado por ciudadanos de Esparta que contasen con algún descendiente masculino a fin de que, en el caso de fallecer en combate, no se extinguiera su familia y siguieran pagando las letras de la casa.
Al principo los griegos dieron pal pelo a los persas, pero Jerjes se hizo amigo de Quasimodo y le enseñó un camino entre las montañas hacia la retaguardia de los griegos.
Leónidas vio que aquello ya estaba perdido, así que dividió a su ejército y permaneció en el paso con 300 espartanos y el resto fueron mandados a sus hogares para contar la heroica historia de estos guerreros espartanos y exagerarla lo más posible.
Jerjes decidió abatirlos de lejos con sus arqueros para no seguir perdiendo hombres, por que si iban lejos se perdían y luego no sabían volver.
Leónidas fue alcanzado por una flecha y los últimos espartanos murieron intentando recuperar su cuerpo serrano para que éste no cayera en manos enemigas y lo violasen.
Y así a lo tonto se murió.