Revista Opinión

Levanta Tus Manos En Tu Desierto.

Publicado el 13 octubre 2018 por Carlosgu82

Y él se fue por el desierto un día de camino, y vino y se sentó debajo de un enebro; y deseando morirse, dijo: Basta ya, oh Jehová, quítame la vida, pues no soy yo mejor que mis padres. Y echándose debajo del enebro, se quedó dormido; y he aquí luego un ángel le tocó, y le dijo: Levántate, come. Entonces él miró, y he aquí a su cabecera una torta cocida sobre las ascuas, y una vasija de agua; y comió y bebió, y volvió a dormirse. Y volviendo el ángel de Jehová la segunda vez, lo tocó, diciendo: Levántate y come, porque largo camino te resta. Se levantó, pues, y comió y bebió; y fortalecido con aquella comida caminó cuarenta días y cuarenta noches hasta Horeb, el monte de Dios. 1 Reyes 19:4-8.

Si leemos la biblia podemos notar que los grandes hombre de Dios, que Dios uso para hacer maravillas y demostrar su poder, para bendecir vidas Dios los llevo a un desierto y saben Dios hace lo mismo con nosotros y con eso me refiero a que nos saca de nuestra zona de comodidad a una zona de prueba de sed de El, de reconocimiento de que en nuestras propias fuerzas nos podemos y ahí en ese desierto lo conocemos mas, porque tenemos tanta hambre de su palabra de su voluntad que suplicamos entendimiento de su voluntad que suplicamos que quite nuestra sed que nos alimente y ahí Dios nos alimenta con su palabra ahí conocemos mas a Dios en oración, ahí Dios nos fortalece para lo que va a venir, ahí nos hace entender cosas y ahí entendemos que para cumplir el propósito por lo que estamos hecho debemos buscar de momento a momento esa fuente y que aveces los desiertos son necesarios para que Dios molde nuestro corazón y mente a semejanza de su hijo en dependencia de Dios para su gloria y honra. Miren lo que dice Dios.

Entonces me invocaréis, y vendréis y oraréis a mí, y yo os oiré; y me buscaréis y me hallaréis, porque me buscaréis de todo vuestro corazón. Jeremías 29:12-13.

Quiero platicarles sobre un desierto que pase fue cuando me fui a trabajar a otra ciudad me fui sola a un lugar muy caluroso tan caluroso que cuando soplaba aire el ventilador lo soplaba caliente como no me pagaban hasta dentro de 2 meses no tenia mucho dinero así que tuve que vivir en una casa de lamina que cuando llovía entraba el agua a mi casa y no había luz en donde había muchos animalitos como cucarachas, lagartijas, un animalito como rata no me acuerdo de su nombre, y aparte de todo estaba yo sola no conocía a nadie y después de cierta hora de la noche no podía salir porque ahí secuestraban robaban etc, entonces ahí en ese desierto yo veía a Dios como me protegía y pasaba mucho tiempo alabándole y en oración, no tenia tv y aveces tenia internet cuando tenia datos o la dueña de mi casa me quería dar internet porque no servía bien el internet, y un día que empezó a llover que empecé a escuchar ruidos en el techo de mi casa que se fue la luz recuerdo que busque un lugar donde sentarme donde no me mojara porque había hoyos en el techo y empecé a adorar a Dios empecé a dar gracias y levantadas mis manos sentí una paz la cual solo había sentido hace 6 años que entregue mi vida a Dios cuando arrodillada junto a mi cama llorando consagre mi vida a Dios arrepintiéndome de mis pecados y creyendo que en Cristo hay salvación una paz ahí sentí en ese sillón, no quería que pasara el tiempo solo quería seguir sintiéndola ahora que lo recuerdo aun se me pone la piel chinita y se me ponen los ojos llorosos de verdad cuando encontramos a Dios en esos desiertos, tu respuesta es vale la pena pasarlos porque sales ahí mas fuerte para seguir llevando acabo las instrucciones de Dios.

Y te acordarás de todo el camino por donde te ha traído Jehová tu Dios estos cuarenta años en el desierto, para afligirte, para probarte, para saber lo que había en tu corazón, si habías de guardar o no sus mandamientos. Y te afligió, y te hizo tener hambre, y te sustentó con maná, comida que no conocías tú, ni tus padres la habían conocido, para hacerte saber que no sólo de pan vivirá el hombre, mas de todo lo que sale de la boca de Jehová vivirá el hombre.
Deuteronomio 8:2-3

No solo de pan vivirá el hombre si no de todo lo que sale de la boca de Jehová, esta hablando que si quieres la vida eterna debes Alimentarte de la palabra de Dios y ocuparte las cosas eternas mas que de las temporales.

no mirando nosotros las cosas que se ven, sino las que no se ven; pues las cosas que se ven son temporales, pero las que no se ven son eternas. 2 Corintios 4:18.

Vivamos la palabra de Dios en obediencia, adoración y oración que sea mas esta nuestra necesidad que respirar.

Levanta Tus Manos En Tu Desierto.


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