Todavía no tengo claro si me he vuelto loco o es el efecto de los calores agobiantes de este verano que ya nos
deja. Imagina, por un momento, que va y es verdad que eso de la crisis ha terminado como nos dice el acompañante andarín de frau Merkel (no se lo cree ni él mismo, pero lo dice y se queda tan pancho). Imagina que hemos tocado fondo y que ya sólo queda empezar a remontar de nuevo. Imagina que no existe eso de la deflación a la que vamos a tener que hacer frente y que sabemos que la destrucción socio económica ha terminado. Mucho imaginar es eso, ya lo decía Lennon en su “Imagine”, pero intentémoslo.
¿Has pensado que harías? Igual lo cómodo y lo que nuestros capitostes quisieran sería que todo siga igual, que nos quedásemos acogotados, viviendo con la boca pequeña, como de prestado, y con cara 
Otros, en cambio, una vez acabado el temporal y después de palparse como para asegurarse que se ha 
Lo más sensato sería recoger los restos del naufragio, recuperar todo lo recuperable de lo que fuimos antes de que los manirrotos nos hundiesen por capricho y para su mayor lucro personal. Hazlo, busca entre los cajones, hazme caso, verás como siempre se encuentra más de lo esperado, has de tener imaginación. Descubrirás que eres muchísimo más de lo que esta gente psicópata, especialista en ningunear, en mentir y en deprimir te ha hecho creer. Tú eres tú mismo, con tus defectos y virtudes pero eres muchísimo más que un número pequeñito dentro de las oleadas macro económicas que nunca llegamos a entender y que poco o nada tienen que ver con nuestras dificultades para llenar la bolsita de la compra del Súper.
Bueno, ya hemos recogido lo que hemos encontrado ¿Y ahora a que esperas? Levántate de nuevo, vamos, siempre es el momento, nunca es tarde para intentarlo una y otra vez. Total, ¿que tienes que 
Es el momento de decirles que ya basta, que sabemos que no nos van a sacar de esta porque son incompetentes y 
Ni se te ocurra pensar que no eres nadie o que no tienes fuerzas para conseguirlo. No es verdad, empieza a andar y te sorprenderás hasta donde puedes llegar, pero sobre todo, levántate de la ciénaga en la que nos han metido y da el primer paso. Verás que la tierra seca está más cerca de lo que piensas y si no, por lo menos, lo habrás intentado. ¿no vale la pena?

