¡Hoy os doy los buenos días totalmente enamorada! Y lo hago del cuento del que os quiero hablar. Se llama Pepita es especial, lo cogimos el otro día de la biblioteca sin hojearlo demasiado, y lo leímos anoche. ¡Casi no puedo terminarlo sin soltar una lagrimita!
Bueno. No os digo nada nuevo si os hablo de las razones para leerle cuentos a nuestros hijos, o por lo menos nada que no haya dicho ya. No solo mejora el vínculo, también la atención, el razonamiento y muchísimas cosas más. Si, además, elegimos libros cuya temática puede beneficiarnos, las razones se multiplican.
En nuestro caso, me interesaba coger un libro que tratara las diferencias individuales, con el fin de adentrar a Bicho en el maravilloso mundo que le ha tocado vivir (necesidades educativas especiales en general y TEA en particular), aprovechando que su colegio es inclusivo y posee alumnado con otros trastornos, y que él ya empieza a tener una edad para percibir estas diferencias. Fuimos a la biblioteca, vi este y pensé, sin hojearlo demasiado, que sería adecuado, así que nos lo trajimos en préstamo.
Y, ¿Qué os puedo decir? Si os digo que es SENSACIONAL, así con todas las letras y en mayúscula, me quedo corta.
Cuento: Pepita es especial
El cuento está narrado por Fabiola, una niña que, junto a su hermano, reciben a Pepita, su nueva hermanita. Pepita es una niña como cualquier otra, solo tiene una pequeña diferencia: Tiene un cromosoma más (es decir, es una niña con Síndrome de Down). Lejos de ser etiquetada y estigmatizada, Pepita es una niña totalmente aceptada, que vive el día a día de igual manera que los niños y niñas normotípicos, y que tiene una personalidad muy divertida. Sus dificultades son vistas como normales, porque, ¿quién no tiene dificultades en su día a día?
El cuento tiene tapa dura, consta de 38 páginas y se compone de texto y grandes y coloridos dibujos. A lo largo de su historia, la familia nos presenta a su familia y nos habla del por qué Pepita es tan especial.
Nuestra opinión personal sobre Pepita es especial
Bonito, tierno y necesario. Así es este cuento. A través de sus 38 páginas, su protagonista nos da una buena lección: la normalización de los trastornos y enfermedades es muy fácil de llevar a cabo, tan solo necesitamos verlos como simples diferencias, ni más ni menos buenas, simplemente diferentes.
A medida que vamos pasando las páginas y leyendo la historia, nos damos cuenta de la necesidad de incluir a las personas con necesidades educativas especiales en nuestro mundo más normal, en nuestro día a día, y de olvidarnos de estigmas ni etiquetas. Lo mejor es cuando, tras terminar el cuento, descubrimos que Pepita existe de verdad, y Fabiola también, y que es su madre quien ha publicado este libro con el fin de concienciar a la población sobre la necesidad de una total inclusión de estos niños y niñas.
Y qué decir de las ilustraciones. Simples, pero bonitas y muy coloridas, aportan un punto de ternura que se palpa desde el principio hasta el final.
Se recomienda para…
Esta lectura es ideal para tratar las diferencias individuales, no solo referentes al Síndrome de Down, sino a cualquier trastorno u enfermedad. Es, diría yo, un cuento imprescindible para tener en la biblioteca de cualquier aula (aunque no haya alumnos con necesidades educativas especiales en ella, y si lo hay, más aún) y en casa. Trabaja valores como la aceptación, la empatía, la amistad y el amor.
Este cuento puede complementar nuestras listas de cuentos para mejorar la atención, y por supuesto, cuentos para contar antes de ir a dormir.
¡Totalmente recomendable!
Ficha del libro:
- TÍTULO: Pepita es especial
- AUTOR/A: Fabiola Arroyo Ozores / Irene G. Lenguas
- EDITORIAL: Beascoa
- ISBN: 978-84-488-5168-2
Os aviso: ¡Os vais a enamorar!