Me parece crucial el debate acerca de cómo se articulan estos valores en un país, creo que trasciende al típico sobre Libertad-Seguridad. Pronto conduce a hablar del individuo y sus derechos y del Estado regulador y su tamaño.
Si lo fiamos todo al mercado desembocaremos en una sociedad injusta por desigual; si, por el contrario, lo estatalizamos todo aparecen la desmotivación y la pobreza.
Ya pasó en la Historia y ambos modelos fracasaron, dando lugar al Estado del Bienestar, que respeta el mercado pero garantiza derechos básicos (“mercancías al mercado, derechos al Estado”).
Ojalá los debates políticos que nos esperan ofrezcan soluciones sobre cómo conjugar libertad e igualdad en nuestra sociedad.